jueves, 29 de marzo de 2012

Manifestado

E indignado. Y todas las cosas que acaben en -ado. Tal vez, incluso, pueda terminar estando enamorado pero eso no viene al cuento por ahora. Lo que sí importa es que hoy, en la manifestación por los derechos pisoteados (otra cosa que también estoy, ves como todo lo terminado en -ado me pega hoy?) había tantísima gente que por juntarse, se nos juntó hasta el mismísimo Pablo Iglesias redivivo (ese histórico dirigente sindical y fundador también del PSOE) que tomó cuerpo en forma de autobús urbano (cómo no, de color rojo!) y se unió a nuestra marcha, aunque fuera en sentido contrario (yo creo que era para que se le viera más).

Y ahora te dejo, que tengo muchas cosas que contar y parece que por fín pudiera empezar a tener tiempo, pero no ha de ser hoy que no quiero contribuír a que luego diga este magnífico gobierno que el consumo eléctrico no ha bajado apenas nada. Asi que mañana, si eso, nos leemos.

Bicos de gominola para todos y para todas!!!!

viernes, 9 de marzo de 2012

Tetas, culos, y carmín en mi nariz

     Todo sucedió en carnavales, pero he estado esperando para contarlo entre otras razones para hacer sufrir a un amigo que lee mi blog pero no quiso salir conmigo cierto día. Ella iba disfrazada con un traje de tan ajustada como escasa tela, marcando su contoneante figura entallada en aquel corpiño de cuadros blancos y azules. Sus ojos, quizás postizos, iban a juego, no por cuadrados, sino por el azul celeste que de sus pupilas surgía. Un tímido encaje blanco enmarcaba los rebordes de su disfraz de Caperucita, mientras de aquellos labios excesivamente turgentes surgían palabras que hacían danzar el carmín rosa que los adornaba.

No, no ha sido ella la afortunada. Aunque a este paso...
     Un trío de chavales comentaban con ella algo entre carcajadas, mientras le sobaban aquellos pechos exhuberantes, ribeteados de purpurina y perlados en sudor. Los miré, y ellos me miraron. Ella, con una timidez tan real como el color de su cabello, reclamó para sí mis ojos e hizo una mueca que interpreté como una sonrisa. Dije "hola" con cierto nerviosismo aderezado de curiosidad y al poco rato eran mis manos las que jugaban con sus senos mientras bailábamos al son de una canción de Lady Gaga.

     Cantamos a dúo el "vivir así es morir de amor" de Camilo Sexto, y nos despedimos con una pirueta al final de nuestro último baile, mientras ella me confesaba que yo cantaba muy bien y yo le respondía un lacónico "lo sé".

     Bueno. No fue exactamente así. Pero se le parece mucho. El caso es que sí, amigos. He ligado con una transexual (jajajaja, qué te creías!) y además no con una cualquiera, no, no, no, con una famosa y todo! Y no diré más porque yo soy muy discreto, por eso tengo un blog en el que salgo en pelotas pero no se me ve la cara, jajajaja. Y claro, comprenderéis que, cuando llegué a casa y me zampé mi tortilla de patatas fritas de bolsa (algún día debería poner la receta en mi sección de reZetas, jajaja) me fuese al baño preguntándome, mientras me limpiaba el carmín que adornaba mi nariz, cuál podría ser el próximo paso en mi desafío a la asexualidad... ¿Volverme hetero?

martes, 6 de marzo de 2012

Decaversario

     Hoy hace diez años que hace cien años que se fundó el Real Madrid. Los mismos cientodiez años que hace que existe la Copa de S. M. El Rey -incluyendo en ellos los años grises de la Copa del Generalísimo- . Y hoy hace también diez años que un equipiño blanquiazul llegó al Bernabeu, ese mítico templo del madridismo, para ser convidado de piedra a una celebración hecha a mayor gloria de los madridistas de la Federación Española de Fútbol.

     Pero hete aquí que los fuegos artificiales no meten goles, y así fue que el equipucho de una pequeña ciudad de provincias se impuso al equipo de los millones y de Florentino, de las torres de la Castellana y de -ays- Cristiano Ronaldo. Es verdad que de aquellas el Depor era mucho más Depor que lo que es hoy día, y el Madrid, probablemente, un poco menos. Pero no es menos cierto que para un chaval de una pequeña ciudad del noroeste de la Península, esos días son días que se escriben en mayúscula, cuando David vence a Goliat y a las estadísticas, y se le da la vuelta a la tortilla y la sorpresa a quienes creían tenerlo todo atado y bien atado.

     Hoy el Depor está en segunda. Aunque va lider en solitario y a un buen colchón de puntos de los demás participantes, así que es posible que el año que viene volvamos a vernos en Riazor con los más grandes. Pero mientras esperamos por que ese día llegue (y mientras soñamos en secreto con ganar aquella Champions que una vez casi llegamos a tocar), de vez en cuando nos gusta recordar que un día fuimos grandes aún en nuestra pequeñez, o si cuadra precisamente por ella. Y que los faustos programados para otros terminaron iluminando nuestra fiesta. Porque no hay mayor orgullo que vencer a los elementos cuando se ponen en contra, ni mayor milagro que mirar cara a cara al destino cuando partes de lo más humilde. 

     Bueno, quizás un milagro mayor sería que Lendoiro dejase de presidir el Depor. Pero tampoco le vamos a pedir peras al olmo.