lunes, 31 de enero de 2011

Plata fundida

     Hoy 31 de enero de 2011 termina la semana plateada de este blog que tan amablemente otorgó Thiago en un acto de generosidad sublime, dado que de momento no existen premios en este blog que puedan compensar tal gesto. Lo mismo se puede decir de Stultifer, que también nos nombró blog del día 28 de enero, aunque según dice Thiago sea mucho más importante ser blog de la semana que del día (al menos matemáticamente debe ser cierto). El caso es que de algún modo eso me pone un poco triste, pero bueno, será que mi blog se hace casi tan mayor como su dueño.

Hermosa foto de un hermoso texto cuyo enlace dejo aquí

     Lo que sucede es que me han enlazado en otro blog porque según parece Bizitza tiene envidia de las 7000 visitas, que si bien es cierto que es un poco sorprendente para un blog de chufla que lleva dos meses y poco funcionando, se aleja mucho del objetivo de lograr un millón de visitas en el primer año, jajajaja.Que no es que se me hubiera ocurrido antes, pero ahora sería el reto a conseguir. Además, como le dije a ella, si este blog te parece que tiene éxito no te digo blogs que tienen cinco millones de visitas o más, ¡eso sí que son palabras mayores!

     Y en esas andaba, pensando en cómo celebrar los 10000 visitantes cuando lleguen cuando me he acordado de otro enlace que tenía que comentaros, y es que Have a nice day, con quien me une una buena amistad en la vida real, ha puesto un post de los de escacharrarse de la risa, más que nada porque es tan real y tan.... (lo siento) Bridget Jones que terminé a carcajadas en mi propia casa.


     Y como quiero que se me termine de pasar el bajón por dejar de ser plateado y volver a mi triste color paliducho de siempre, os dejo con un video que me recuerda muy mucho a lo que más se lleva en el día a día de la actividad social nocturna. Que lo veis o no lo veis, a mí me da igual, pero al menos cuando yo lo ví me dibujó una sonrisa (enlazado después de mirar el blog de fiebre, "ofú... ahora un blog"). Aunque me sigo acordando de que alguien me llamó "clásica" hace dos semanas. ¿Será mi futuro como el de la Blasa, encerrada en una jaula esperando a quién atacar?

domingo, 30 de enero de 2011

Postureo

     Acción de posturear, hecho de poner o adquirir o adoptar una postura. 

     Postura, según la RAE:

(Del lat. positūra).
1. f. Planta, acción, figura, situación o modo en que está puesta una persona, animal o cosa.
2. f. Posición o actitud que alguien adopta respecto de algún asunto.
3. f. Acción de poner o plantar árboles tiernos o plantas.
4. f. Planta o árbol tierno que se trasplanta.
5. f. Precio que el comprador ofrece por algo que se vende o arrienda, particularmente en almoneda o por justicia.
6. f. Pacto o concierto, ajuste o convenio.
7. f. Porción o cantidad que se suele apostar entre dos sobre si algo será o no será.
8. f. Conjunto de huevos puestos de una vez.
9. f. Acción de ponerlos.
10. f. En los juegos de azar, cantidad que arriesga un jugador en cada suerte.
11. f. Precio que la justicia ponía a las cosas comestibles.
12. f. coloq. Ál. y Guip. Medida agraria de 34,26 m2 de superficie.
13. f. ant. Adorno de algunas cosas.


"Clásico postureo", de este blog
     En román paladín, por postureo se entiende toda una secta o cuasireligión a tenor de la cual uno se muestra y juzga, a partes iguales, mientras un juego de miradas y gestos preestablecidos se establece previo al acto de cortejo que antecede a una posible relación, ya termine esta en acto sexual o en bofetón sonoro.

     Que más o menos es lo mismo que la RAE dice, especialmente en alguna acepción, porque muchas veces es cuestión de poner árboles a plantar, demuestra cierto grado de venta del producto (el sujeto que posturea), con frecuencia requiere de pactos o acuerdos de colaboración, en ocasiones mediante el intercambio de apuestas incluído, y desde luego hace falta echarle muchos huevos en ocasión. Y no siempre en sentido figurado.

     La regla básica del postureo es, sin duda alguna, el principio de reciprocidad, según el cual si tú me... yo te... Normalmente se desarrolla en cuatro fases, que expondré por su normal desarrollo cronológico: 

Fase 1: Si me miras, te miro (razón por la cual hay que adoptar poses favorecedoras y mirar a todos lados mientras intentas ser mirado, de donde se deriva el nombre de esta táctica de ligoteo más bien absurda y de éxito usualmente dudoso).

Fase 2: Si me saludas, te saludo.

Fase 3: Si me hablas te hablo (esta última es un poco variable y depende del sujeto en cuestión, no siempre te encuentras con respuestas agradables y a veces más que una conversación es un gruñido lo que se recibe).

Fase 4 y definitiva: Si me besas... eres un arrastrado.

     De lo que se desprende el segundo principio del postureo, ciencia sin igual que no posee premio Novel por el momento pero que ha requerido grandes inversiones en tiempo, dinero y talento, y que reza del modo siguiente: Quien se mueve primero es quien está más desesperado

     De modo que si te gusta mucho alguien, y eres el primero en dar un paso, siempre tendrás que cargar con el sanbenito de ser el que va a ceder. Y si no lo das... te expones a que otro lo dé por tí. 

     Porque de aquí deriva el tercer y último principio del postureo: El oscuro objeto de deseo nunca, jamás va a ceder a tus pretensiones desde el momento en que has sido tú quien ha iniciado el movimiento de aproximación. Así que si te gusta alguien no hagas nada por acercarte. Porque lo más probable es que no tengas nada que hacer si no te acercas. Pero si lo haces, olvídate.

     Por todo esto y mucho más, se relaciona directamente con el arte del Divismo, del cual hablaré otro día para no extenderme en demasía.

La fiesta terminó

Paloma San Basilio dixit: No insistas más, la fiesta terminó, tú y yo ya no somos tú y yo... 

     No, no pienso hacer un escrito de la melancolía del amor pasado, esténseme todos tranquilos. Cuando digo que la fiesta terminó, lo hago diciendo hora y localización exacta: A las tres y cuarto de la mañana, el último de los amigos de mi hermano salían de mi hogar después de celebrar su 29 cumpleaños. Yo me quedé en casa, no para limpiar, que para eso -espero- contar con mi brother, sino para dormir (he dormido nueve horas y buena falta que me hizo). Aunque en realidad más que ayuda para limpiar casi podíamos llamar a un albañil a que alicate de nuevo toda la cocina de tanta porquería que hay, jajaja.

     La verdad que esto de las fiestas en domicilios particulares son un engorro, aunque yo tengo mucha suerte con mis vecinos, básicamente porque no tengo (supongo que es lo que tiene cuando la gente se compra un piso para especular, que en mi edificio debe haber una vivienda ocupada por planta, y dos vacías, jajaja).

     Así que ayer, como os decía, se celebró el vigésimonoveno (o vigésimonono) cumpleaños de mi hermano, al que invitó no tantos amigos como años cumplía, pero casi. Y a eso de las ocho y media de la tarde, se apuntó un primo mío también, por lo que ya puestos, llamé a Have a nice day para cenar juntos y luego ir también a la fiesta que, al fín y al cabo, era en mi domicilio. En total éramos 27 personas, repartidas entre salón, cocina y terraza, aunque casi toda la actividad se desarrolló en la cocina (tanto es así que hubo quien protestó por no tener una cocina más grande, mientras yo me preguntaba por qué no íbamos a un concurso como aquel mítico "¿Qué apostamos?" de Ramón García y Ana Obregón).

     Mientras mi primo se bebía hasta el agua de los floreros (si los tuviera, que no es el caso) y alguien comentaba que la única diferencia entre mi cocina y un pub era que habia más luz y menos música, Have a nice day maniobraba -con cierta torpeza, para ser francos- contra los envites de un individuo de género masculino al que llamaré "el chico de blanco". Pobre chico de blanco, que estaba borrachito como si a Bob Esponja lo dejamos macerar en una botella de anís. De repente, entre el ruido ambiental, llegaron a mis oídos unos susurros de súplica, de Have a nice day diciéndome "protégeme", pero al final se cogió las de VillaDiego y se marchó en taxi para su casa, apenas un cuarto de hora antes que el resto de la gente. Mi primo insistía en que yo saliera pero yo, que venía de trabajar y surfear, y estaba muy muy muy cansado, me negué. Bueno, por eso y porque me he prometido que no vuelvo a salir desde el episodio de la semana pasada en que me dijeron que era una clásica del ambiente y que estaba más visto que las pesetas (que te diga eso una pieza de museo también tiene su enjundia). Así que equipé a mi primo con el pack "salir por ambiente desconocido", le anoté la dirección de un par de pubs gays, le dí una copia de mis llaves, la dirección de mi casa para que el taxista supiera dónde debería depositarlo, y me fui a la cama.

     A las ocho me levante porque tenía el traje de surf mojado y estaba intentando secarlo a base de calefacción. Mi primo no había llegado. Mi traje seguía chorreando. No sabría decir qué me jodía más. 

     A las doce y media, mi traje seguía empapado. Mi primo seguía sin dar señales de vida. Y yo no sabría decir qué me jodía más. 

     A la una y media mi primo llamó. Estaba a quince kilómetros de Coruña. Entonces pensé que ya sabía qué me cabreaba más. Claro que al menos no había perdido las llaves, yo que ya me veía llamando a un cerrajero para cambiar la cerradura. 

     Finalmente, a las dos y pico llegó mi primo a casa, hablando en francés porque tiene una faringitis del demonio (no voy a preguntarle qué se ha metido dónde, claro que lo mismo de ahí viene el nombre de ciertas prácticas sexuales, se me ocurre pensar). Lo he dejado en mi cama hinchable durmiéndo plácidamente. Yo ahora mismo estoy peleándome con el traje de surf para irme a hacer eso que yo hago y que no puede llamarse surf, pero que se le parece. Por supuesto, con el traje empapado y a siete grados de temperatura del agua. Y ahora sí que tengo claro qué es lo que más me va a joder. XD

sábado, 29 de enero de 2011

Sin Ataduras


     Pienso que no tuve límites en ningún momento, creo que no pretendí tenerlos. Luché, en fín, con esfuerzo por conseguir mi objetivo, por obtener ese hecho. No tolero bien el ser un ente restringido o tieso. Constreñirse, circunscribirse, no estoy de ese modo hecho. En otro momento previo, fue Eurice quien meditó y, en su breve reflexión, dejó dicho cómo se nos limitó por escribir siendo estrictos, imponiendo rigideces en el empleo del verbo. Yo hoy digo NO, me revelo. No, no enmudeceré de nuevo el sonido de mi voz. No en este tiempo. No pienso. Ni un minuto. Ni un segundo. Ni un sólo leve momento. No puse un silencio siempre que pretendí decir lo que quise en otro tiempo, y no he hoy de ponerlo. No quise, no querré, y no quiero, sufrir tener quien me indique lo que se debe decir, ni cómo decirlo debo. No volveré envuelto en silencio oyendo los por qués de otros, o sus reproches de necios. No soporto ese yugo del orden predefinido, y mucho menos que lo que quiero decir termine dicho como otros obliguen, con un estilo concreto, con otro timbre, con otro cuerpo. O no soy yo de mi mismo el dueño. 

     Desde pequeños se nos dice cómo debe ser el mundo hecho. Dónde poner los pies, y en qué punto detenerlos. En qué momento seguir y en qué momento contenernos. Los vuelos son suceso de otros, nuestro límite es el suelo. Pero no es ese mi fín. ¡No es mi sueño! Porque soy libre, porque quiero, como el sol en cénit pleno, libre como el viento fresco, porque debo y porque puedo, por todo y por eso, ¡me niego!

     Como dije en otro giro, no prentendí tener fín, no pretendí constreñirme. Intenté sólo ser yo y dejé oir mi voz. No fue sencillo vivir, ni dije yo que lo fuese; seguir sufriendo en mi ser con el yugo de lo estricto, pero fue siempre posible, y ésto como modelo dejo. Vuelve tus ojos, relee y procede: El recuento, si no yerro, debe, creo, de ser un cero.

     NÓTESE: Stultifer y otr@s... el título no debe introducirse en el cómputo.

El mail de Z

     Yo es que no he dado una en informática desde que tengo uso de razón. O mejor dicho, cuando las he dado, las he dado tan bien que ni un experto, oiga. Aún recuerdo una vez, cuando teníamos en casa el primer ordenador (bueno, el segundo, que el primero en vez de floppy discs llevaba cintas de cassette, alucina) que no sé a qué cojones le dí y terminé fundiéndome todos los archivos. Sé que no formateé el disco, porque eso sabía hacerlo. Lo que no sabría es decir qué pasó, pero un ingeniero informático estuvo tres días para terminar diciéndonos que lo mejor era formatearlo todo y volver a empezar a usarlo (digo yo que para eso tampoco hacía falta una ingeniería, vaya).

     Toda esta monserga viene a tenor de que no he acertado. Elegí mal el nombre de mi blog porque yo quería llamarlo el blog de Z pero alguien se me había adelantado (para luego no publicar ni una entrada, que así me salen a mí los 1500 blogs que se crean al día, claro, sólo faltaba que Thiago y Stultifer los premiasen, jajaja) y por eso es el más personal y egocéntrico "yo soy Z" que todos conoceis y algunos hasta quereis (bueno, no es que me lo haya dicho nadie pero sino es que alguno de vosotros es realmente masoca).

     Hace dos posts (or so) que OGG me acusó de que no tengo mail para no sé qué rollo de un banner (hijo, no hace falta que te mates en detalles si a mí o me lo dices en román paladín o no me entero. Y ni aún así, seguro). Así que me disponía hace cinco minutos de reloj a poner un mail para este blog, que digo yo que el que tenía antes es el que usaba para el facebook y tampoco es plan que luego me inundeis a peticiones de amistad, jajajaja (creo que empiezo a tener delirios de grandeza). Así que fui a cambiar la cuenta principal y... me han quitado mi cuenta! Pues no existe ya una cuenta yosoyz@gmail.com? Que me dan ganas de escribirle un mail para decirle cuatro cosas a esa letra robaidentidades ¬¬ (seguro que es la misma z que me ha robado el nombre del blog. Capulla...)

     En resumen, que al final, a falta de otra candidatura más sensata el mail de Z es justamente ese, elmaildez@gmail.com

     Para lo que gustes y desees, OGG. Y si alguien más se apunta, pues también. Que si yo me hice un blog era para no aburrirme en noches como la de hoy, qué caray!

viernes, 28 de enero de 2011

Las misteriosas gafas de Zhane Asae


     Hoy camino del trabajo me he cruzado con una compañera que, como yo, venía en coche. La he visto un poco ofuscada, con una conducción digamos poco menos que temeraria, y con una postura de todo menos cómoda y relajada, pues iba mirando los coches con el cuello flexionado y los ojos forzados hacia arriba, tanto es así que parecía un toro de lidia embistiendo un capote. Comprenderéis que mi curiosidad, aunque suelo ser poco dado al cotilleo, se despertó de forma poderosa, y en cuanto tuve oportunidad me acerqué a su despacho a preguntarle por ese nuevo estilo de conducción o, hablando más en serio, por si se estaba enfadada por algún motivo y necesitaba que alguien la cubriera en su puesto de trabajo para ir a tomarse una tila o algo por el estilo. La encontré enfrentada con unos papeles, a los que jugaba a colocarse delante de los ojos, ora cerca, ora lejos, mientras sus labios susurraban juramentos que no repetiré -más que nada porque no los pude oir, claro-.

     "Zhane -dije yo- estás bien? Te crucé esta mañana en el coche pero venías que parecías un miura desbocado."

     "Y no habría de parecerlo, Z, si hoy estrenaba las gafas que me han dado en la óptica ayer y estoy que no veo nada, pero nada, nada de nada. Esto de comprar unas progresivas es una mierda que no te aguantas."

     Resultó, después de mirar las gafas atentamente, que lo que sucedía era que los cristales estaban montados al revés, de forma que para poder ver de lejos, mi compañera tenía que echar la cabeza para atrás como si estuviera en la consulta del dentista, y para ver de cerca, torcer la cabeza como si fuera un ariete intentando abrir la puerta de un castillo medieval. Tal era la situación en la que me la había encontrado yo esta mañana.

     Las soluciones que se nos ocurrieron fueron dos. En primer lugar, y para poder trabajar durante el día de hoy, ponerse las gafas del revés, aunque llegamos a la conclusión de que, para evitar que se le cayeran, había que atarlas por detrás, para lo que utilizamos una goma elástica de las que suele haber en todas las oficinas (lo cual las hacía poco útiles a largo plazo, por lo que decidimos que era sólo una solución temporal). La segunda, que a la tarde iría a que le cambiasen los cristales bajo amenaza de denuncia. Os diré que, finalmente, la óptica se hizo cargo y en apenas una hora las gafas ya funcionaban como se supone que debían hacerlo.

     El caso es que desde entonces ando rumiando sobre cómo sería tener unas gafas para verlo todo al revés. Entendedme, no me refiero a unas gafas como las de Zhane, que de tanto estirar y doblar el pescuezo seguro que acabábamos con una hernia discal (aunque sería muy gracioso ver a la gente con un movimiento tan positivista en estos tiempos de crisis), sino a unas gafas que permitieran ver lo blanco en negro y lo negro en blanco, lo malo en bueno y lo bueno en malo, convertir al feo en guapo y al listo en tonto. Me imagino las colas de manifestantes atractivos protestando a las puertas de las ópticas, y las asociaciones de feos, y tontos (aunque dudo que las haya, nadie se considera tonto en este mundo, la verdad) financiando su compra de modo masivo por toda la población (las asociaciones de pobres darían su apoyo pero como seguirían siendo pobres hasta que las gafas se popularizasen no podrían ayudar económicamente en la campaña). El problema de todo eso es que no me imagino a ningún ser inteligente o atractivo comprándose unas gafas para verse tonto o desagradable, y el summum del asunto llegaría con la invención de las lentillas para ver del revés. También darían mucho juego en los ligues nocturnos, porque tanto los heterodares como los gaydares servirían más bien de poco con tanta gafa y contra-gafa (supongo que sus efectos se anularían, como los imanes).

     No tengo ni idea de en qué terminaría toda esta historia, pero imagino que el caos absoluto llegaría el día en que a alguien se le ocurriese hacer el pino con unas de ellas puestas y se diera cuenta de que llevaba toda la vida... caminando boca abajo.

Otro premio que nos han dado!

     Yo esto de los blogs cada vez lo entiendo menos. Ahora a la gente le ha dado por premiar este blog con sus memeces (bueno, las mías, que vosotros haceis comentarios bastante más sensatos) que parece que esto sea una competición. Hasta me he planteado si esto va a ser un examen o qué, jajaja.  Si hace tan sólo dos días Thiago va y nos suelta un premio plateado al mejor blog de la semana, hoy va Stultifer (bueno, el día 28, que técnicamente ya es hoy, pero que en realidad para mí será mañana) y nos engalana con el premio al "mejor blog del día", ahí es nada! O sea, que en los dos últimos días habéis estado leyendo el mejor blog de la blogosfera, y vosotros sin saberlo.

     Porque encima no sólo es que tengamos (bueno, vale, que tenga yo que para eso soy el que postea, jajaja) dos premios, no. Es que está la ida de olla de Sergio con su historia para reinventar, que encima, en una de mis brillantes cagadas, ahora he pasado no a un bloguero sino a dos, nada menos. Que se me ocurre que si seguimos a este ritmo en tres días serán ya... joder, voy a por la calculadora otra vez.

     De una charla hago dos y la paso a otros dos blogueros, hace cuatro. Pero ellos a su vez hacen dos versiones, y van ocho. La pasan a 4 blogueros, dos por cada uno, que harán dos versiones de las que ya están versionadas, es decir, 32 versiones. A este ritmo, Sergio, para cuando termina tu concurso (el 3 de febrero, era, no?)  me salen 8192 historias! Ay mi madre creo que algo no he contado bien...

     Bueno, que da igual y me desvío, al final no sé en qué van a quedar estos dos, pero Have a Nice day, por lenta en contestarme (que hasta hubo llamada telefónica y todo, eh!) te chinchas y que pringue Pimpf, que además así a ver si me da un premio Pimpf el año que viene que ya le voy pillando el gusto.

     Que por cierto, Stultifer, vaya mierda de dedicatoria, eh, que si es más impersonal parece la carta de Botín que llega a casa cada tres meses para informarnos de lo bien que le va a su banco.

     Pero bueno, que muchas graciassssss... :-)

     PD: Intuyo que, si en el caso de Thiago, podía ser que ya se estuviera quedando sin candidatos, en el tuyo aún más, claro porque a 365 premios al año ya me dirás, que no sé ni cómo haces para no repetirte más que un plato de fabas, jajaja. Pero bueno, que tienes muy buen criterio, para qué negarlo si en el fondo todos sabemos que es verdad, jajajaja.

jueves, 27 de enero de 2011

Porterizando revolution

     Resulta que Sergio se cayó de un guindo. Esto no es algo que haya pasado ahora, no, fue cuando era crío, y el pobre desde entonces tiene delirios de cuando en vez. Hoy ha tenido una feliz idea de estas suyas y ha decidido postear en su blog una historia para que sea reeditada por algunos blogueros y a mí me ha dado el honor de comenzar con el remix de su historia. Si queréis intentar entender exactamente en qué consiste el premio, pasaos por su blog que os dejo aquí con todas las normas. Aunque yo, que ya lo he hecho, no termino de entender del todo si se supone que debo contar algo a lo malapécora y transformar una historia insulsa en un suculento cotilleo, o simplemente delirar dejando volar mi imaginación que tampoco está en horas álgidas. Así que, pese a que lo he consultado, la respuesta ha sido de lo más gallega, como no? y me ha dicho que lo uno o lo otro. Y yo, que otra cosa no, pero a generoso no me gana nadie he decidido hacer ambas las dos versiones, por un lado una creíble, y por el otro, una delirante, y que el que siga continúe la que prefiera, la rehaga o la destroce, total ya puestos...

Éste es el texto original a reversionar:

“Ayer salí del trabajo algo agobiado, necesitaba airearme un poco, así que me fui a dar una vuelta por Santiago sin rumbo fijo, estaba cerca de la Plaza del Obradoiro, cuando se me acercaron una pareja de inglesas que me preguntaron por dónde tenían que ir para llegar a la catedral, en mi inglés chapucero intenté darles las indicaciones, mientras me lamentaba de no tener a Fran conmigo, el cual podría haberlas orientado mucho mejor que yo. Un rato después, me tropecé con un conocido, con el que tuve un lio hace años, y este me invitó a tomar un café, que acepté un poco sorprendido. Estuvimos una hora en la cafetería, poniéndonos al día de nuestras vidas y luego nos despedimos con un “ya te llamaré”, que muy probablemente ninguno de nosotros cumpla. Cuando volví a casa, Fran ya había llegado, estuvimos el resto de la tarde juntos, y luego él se fue a estudiar un poco y yo a chatear por el MSN con algunos blogueros”




He aquí mi primera versión, la que llamaremos cotilla, pero creíble a la vez. Yo lo habría narrado así...

     "No os vais a creer lo que me ha contado Sergio hoy. Bueno, exactamente no me lo ha contado, pero lo ha dado a entender. Resulta que el otro día, al parecer, se agobió en el trabajo y se fue a pasear por la ciudad para desestresarse. Fue entonces cuando encontró una pareja de extranjeras, inglesas, me parece que dijo, y estuvieron coqueteando con él porque, yo -que lo ví a la mañana- realmente iba muy guapo ayer. El caso es que hablando con ellas (o peleándose con su inglés, mejor dicho), se encontró con un exnovio que me parece que les terminó indicando la dirección por la que preguntaban las chicas. El caso es que no me preguntes cómo, pero Sergio terminó yéndose con su ex a tomar un café, que se prolongó durante horas. A mí todo eso me suena muy raro, porque además creo que tiene problemas con Fran, no hacía más que lamentarse de que nunca lo tenía al lado cuando lo necesitaba, por ejemplo en el momento de las chicas inglesas, y de hecho al llegar a casa él se fue con el ordenador y Fran se puso a estudiar y creo que ni siquiera se dirigieron la palabra. Y yo, la verdad, no es por malmeter, eh, pero casi juraría, por cómo me lo dijo, que hubo temita con su ex. Pero claro, eso no lo puedo asegurar, sólo es la sensación que me dio..."

     Sin embargo, podría ser que yo hubiera soñado con Sergio, en cuyo caso la historia habría tenido algún componente más delirante y habría sido algo del estilo...

     "Parece que fue todo a causa del trabajo, ya sabes. Anda el pobre de Sergio algo agobiado con su despachito en el que no le cabe una flor, así que al terminar ayer, se fue a dar una vuelta sin rumbo fijo. Iba en el coche cuando un par de peregrinas inglesas le hicieron autostop luciendo pierna, y él, que andaba triste porque no encontraba el móvil y no podía localizar a Fran, las dejó subir, porque era muy raro ir en minifalda en los alrededores de Santiago en pleno invierno. Le pidieron ir a la plaza del obradoiro pero por el camino se encontró con un exnovio que tenía algún problema en el coche y no podía seguir. Se bajaron a ayudarle pero no fueron capaces, así que el exnovio se subió con ellos después de que una grúa vino a buscarle el coche para repararlo. Llegando a Santiago, las chicas se pusieron muy nerviosas. De repente, una de ellas empezó a vomitar y se fue poniendo verde, verde, verde al mismo ritmo que su cabeza comenzó a hincharse como un globo, mientras la otra se mordía nerviosa el labio. Fue justo en ese momento cuando dos hombres vestidos con traje negro cruzaron su coche en la carretera y les hicieron señas para que se bajasen con sigilo. De repente, la chica verde de cabeza grande se descalzó y de sus calcetines surgieron unas raíces, ¡Era una coliflor gigante! La otra chica huyó despavorida y creo que aún la andan buscando. Al parecer se trataba de unas terroristas interplanetarias que querían colonizar la catedral. Ahora andan los hombres de negro registrándole hasta la cuenta del MSN y todo. Total, que el pobre Sergio terminó con el ordenador confiscado, el coche lleno de vómitos, y sigue sin poder encontrar a Fran, que ha desaparecido con todo ese escándalo."

     Espero no haber defraudado demasiado las expectativas puestas, querido Sergio. Por si acaso, y mientras dure el día de hoy, supongo que puedo esperar a que te lo leas y emitas un juicio. Mientras tanto, me voy a ir a hacer spinning para cuidarme un poco los michelines, jajaja. A la noche te leo!

     PD: El siguiente bloguero supongo que lo eliges tú, no?
Bueno, pues tras comentarlo con Sergio, y dado que mi queridisima Have a Nice day no ha dado señales de vida, se me ocurre que tal vez malaputa se apunte. Lo malo que como esa mujer de moral distraída no siempre se lee mi blog, me parece arriesgado pasarle a ella el marrón relevo. Así que... nomino, nomino... a... jejejeje, iba a decir Stultifer o Yogur, pero ya se me han adelantado, así que por listos, tampoco. Y como a Thiago ya parece que lo acose y no quiero que su novio me ponga una vela negra, voy a nominar a Pimpf, que seguro que Thiago acaba cayendo en manos de otro "nominator". XD

El diario

     En el diario encarnado que testificaba sus días, 1 escribió: Lo he hecho. Al fín lo he conocido. Ha sido un encuentro perfecto. Reimos, paseamos, hablamos, y sobre todo me escuchaba. Sentí cómo conectábamos. Y esa magia en su mirada cristalina... estaba agotado, pobre, no podía reprimir algún bostezo pero siempre lo acompañaba de alguna pícara sonrisa. Me armé de valor y le cogí la mano. Me miró, y la apartó sonrojándose por la vergüenza. Me miró. Le miré. Y entonces, justo cuando íbamos a besarnos, apareció su autobus y tuvo que marchar. Ardo ya en deseos de volverle a ver.


     En el diaro verde, escribió 2: Finalmente he cedido a sus deseos. Hemos quedado. Craso error; ha sido un desastre. ¿Cuántas palabras caben en una boca? ¡Pensé que jamás se iba a callar! Hablaba sin parar de un tema a otro tocándolos todos sin ninguna profundidad. Pese a que mostré mi desdén con ganas, pese a que no hice ningún comentario, él siguió hablando y hablando sin parar. Por momentos no podía evitar reirme mientras hurdía planes de huída, pensando en cómo escapar de allí. Bostecé una, dos, mil veces. Y entonces cogió mi mano. Me dije "éste no se entera", y la retiré enfurecido, rojo de la ira. Le miré con asco y en sus ojos de besugo ví reflejada la figura de un autobús que se acercaba. Terminé a cinco kilómetros de casa, pero lejos al fín de aquella pesadilla.

Informática vs Z

     Bueno, estoy que no meo desde que Thiago me ha dado el premio, aunque gracias al comentario de Bizizta, que me ha hecho pensar, sé que no me lo merezco, pero he llegado a la conclusión de que, claro, Thiago lleva seis años haciendo su blog y en este tiempo a premio por semana, supongo que se habrá quedado sin mucha gente más a la que dárselo. Así que yo encantadisimo de la vida.

     Y en esas estaba, todo feliz siguiendo los pasos para colgar mi maravilloso premio, cuando caigo en la cuenta de que soy incapaz de encontrar el (leo textualmente del comentario de Thiago) encontrar "el gadget ese que dice poner una imagen". Así que tras tres intentos frustrados (mañana que supongo que tendré un día menos ajetreado, que mirad a qué horas me puedo poner a hacer un post) he decidido dejar mi suprepremio en la recámara. Y pensando en premios y premios, me he acordado del premio más absurdo que en el mundo ha sido (o, al menos, el más absurdo que a mí me cayó en gracia). Todo fue durante el instituto. Como yo ya era rarito de narices, de los que escuchaba la cadena SER con sus contertulios del "Hora 25" del malogrado Carlos Llamas, y cosas por el estilo, pues muy en mi línea Steve Urkel decidí meterme en un grupo de ajedrecistas, supongo que ya para terminar de ganarme el mérito de ser un friki. 

Prueba palpable del absurdo mundo de la premística
     Claro que ir a un grupo de ajedrecistas sabiendo de ajedrez que el alfil mueve en diagonal y el caballo va saltando, no es demasiado sensato. Aprender, de ajedrez aprendí más bien poco. De la vida, muchísimo. Lo primero, que lo importante es la pose. Que el día del torneo te graben mientras te comen a la reina resta mucho glamour. Lo segundo, que hay que mantenerse digno incluso en las peores circunstancias. Seguir participando para ver como sistemáticamente pierdes todas las partidas y no dejarlo indica dos cualidades muy útiles en la vida real: perseverancia e insensatez. La tercera, y quizás, mi preferida, que no importa lo que hagas, sino lo mona que queda tu estantería con un trofeo idéntico al del resto de los participantes en el torneo. 

     Y no, no hubo premios en metálico.

miércoles, 26 de enero de 2011

Argentâtus summus

     Ay, madre mía, que me han premiado!!!! Y ahora qué digo yo? Me siento tan perdido como cuando le preguntaron a cierta Miss qué opinión tenía de Rusia... De momento voy a anular lo que había escrito y tenía programado publicaros este mediodía...

     Uffffff, necesito meditar, necesito trabajar un poco y dentro de un rato cuando se me pase el susto vuelvo y termino este post.

     Bueno, vale, ya han pasado unas horas, y acabo de arrancarle quince minutos a la comida antes de irme a dar clase (porque entre otras muchas cosas ahora también soy profesor, jajaja) para alabar la sabiduría de mi premiador. Todo aquel que me lea sabrá, porque hablo de él más que de mí mismo -bueno, es un decir- que sigo el Blog que Thiago, cuyo autor, huelga decirlo, es Thiago. Que por cierto ya me putea algún amigo cuando le llamo por teléfono y sólo me dice "cari" cada tres segundos, aunque eso creo que también lo he contado ya (es aquí donde debería poner un enlace a mí mismo pero me parece un poco snob, no?). Pues bien, esta mañana, mi queridérrimo Thiago me ha otorgado su magnífico premio semanal (él es que es muy magnífico, ya veis, y da premios por semanas, casi como la Lotería Nacional) al "Blog Plateado" número LXXVII (hechad vosotros las cuentas que yo me pierdo con tanta letra).

     Vaya, que no es que no me lo merezca, eh, pero me sorprende que al final Thiago me haya otorgado tal mérito después del post de ayer -y de su comentario (ya no me parece tan snob autoenlazarme, donde dije digo digo Diego) diciéndome que me había quedado sin él, ejem, ejem-. Que digo yo que lo mismo me lo ha dado porque no se le ocurrió un tema para cambiar el post que ya tenía hecho.

     En fín, de momento lo que no se puede dudar es que tu premio, Thiago, ha sido como cuando tienes una planta toda mustia en el salón, medio muerta, y la riegas y entonces va la planta, se pone toda hermosota, y saca una flor. Porque por arte de birlibirloque (que es una expresión muy de mi padre, por cierto) he pasado a tener tres nuevos seguidores e intuyo que terminaré el día con más visitas de lo habitual. ¡Ay, si es que este hijo mío que es mi blog está creciendo todo hermosote!

     Sólo hay dos cosas que me mosquean... una es algo que he leído en los comentarios de tu blog, que todo el mundo dice que yo tengo mucha pluma, pero será la envidia de mi literalidad, jajajaja. La otra, que no sé cómo demonios hacer para colgar tu regalo en mi vitrina (claro que no tengo una vitrina de regalos, nunca pensé que me lo fueras a dar tan pronto, Thiago, jajaja).

     PD: Con Bridget Jones no me unen los michelines. Sólo las faldas cortas y los jefes impresentables que voy dejando por el camino. XD

Alejandra Guzmán

     Entre Sergio y Thiago (al que tengo enfurruñado pero espero que sea una pose) andan rememorando escenas de su pasado y yo, qué queréis, entre lo bien que escriben y lo de ponerse a pensar, me he quedado un poco plof. No porque no tenga un pasado, sino porque el mío no está lleno de agradables experiencias o recuerdos entrañables. Mi relación con el sexo en general y el masculino en particular está teñida de clandestinidades y desastres reiterados, así que hace ya tiempo que decidí fusilar su recuerdo (más o menos el día en que metí el corazón en la Termomix). Sin embargo, estos escritos tan hermosos (que a mí casi me da vergüenza seguir publicando estas mamarrachadas con ausencia completa de orientación, y parcial de estilismo) han traído a mi memoria el niño que un día fuí y que sí, también tuvo sus sueños y sus esperanzas. 

     Pero no es tiempo de ponerme melancólico porque yo quiero reirme con el blog y lo de abrirse demasiado suele doler bastante (vaya con toda la ironía que se quiera interpretar). Así que, de los recuerdos de aquella infancia infeliz a ratos, desde hace un par de días pulula en mi cabeza una escena de un viaje a Torremolinos con mis padres, a cuarenta grados en un coche sin aire acondicionado, con mi hermano y dos primos (sí, cuatro en total, y sin cinturones, claro) en los asientos de atrás en el viejo Seat Mirafiori (fíjate tú si seré viejo que recuerdo hasta su matrícula), mientras sonaban dos canciones en concreto. Por un lado, el Hoocked on a feeling que puso de moda años más tarde Ally McBeal (esa serie me nutre de información para la mitad de mis posts, no?), con su "Ukaukaukashakaukaukauka", y por otro lado la canción más exitosa que Alejandra Guzmán, roquera prestigiosa en su México natal, tuvo en este nuestro país. La canción en sí es poderosa, fuerte, rock en estilo puro, y siempre me ha gustado volver a oirla. Pero si la canción de por sí ya me resultaba pegadiza, el día en que ví aquel videoclip, mi pequeña mente asexual hasta el momento comenzó a vibrar. Aquella espalda fibrada remontando la montaña del cuerpo de su pareja, la escena en penumbra, las gotas de sudor mojando las pieles desnudas y ese ambiente de tensión sexual que se respira en todas las escenas de los dos amantes se quedaron grabadas a fuego y para siempre en mi memoria. Tanto, que cuando el calor nos apelmazaba en aquel asiento de atrás, y desde la radio sonaba aquella melodía, no pude sino cerrar los ojos y pensar en el día en que yo también tendría un ángel desnudo bañado en sudor para mi uso y disfrute.

     Y así me quedé, esperando, jajaja.

     PD: Vaya a modo de disculpa con Thiago... fíjate que la chica en alguna de las escenas sale plateada, plateada, como a tí te gusta :-P

martes, 25 de enero de 2011

Jennie

     Mi amigo P. del que ya os he hablado en alguna ocasión, dice siempre que cada vez que quiero ligar saco a relucir el tema de mi vida en Nueva York. Y yo, antes de que nadie deduzca que quiero ligar en este post, digo que no tengo la culpa de tener una vida tan interesante. El caso es que, por si no ha quedado claro, hace más pocos que muchos años y con afán de conocer mundo, me mudé a trabajar -gratis, que soy así de altruista- unos meses a NYC. 

     Algún día hablaré un poco de la ciudad y sus impresiones, más que nada por si alguien tiene planeado hacerse un viaje (tengo lo que en su momento fue un blog vía mail guardado en mi cuenta de correo electrónica del que tiro cada vez que alguien me pide consejo), pero hoy quiero hablaros de lo extraño que es todo si lo pienso hoy día. Me fui a una ciudad desconocida, a 10000 km de distancia de cualquier persona con la que hubiera tenido trato, a vivir en una casa compartida con otras dos personas de las que no sabía absolutamente nada, encontrada por internet, con un hombro luxado apenas quince días antes (de hecho tuve que cambiar mi vuelo de llegada y el de regreso por ese motivo) ayudando a mi padre a recoger la hierba en un día de borrachera a las cuatro de la mañana (todo muy lamentable, el borracho no era yo, vaya por delante). Que por cierto la traumatóloga que me vio a la semana no había visto nunca a ningún paciente que se redujera solito la luxación, pero a mí a carácter no me gana ninguna articulación.

     Así que allí llegué yo, con mi cabestrillo en el brazo y mi maleta de 23 kilos a la puerta de la calle... vaya, ya no recuerdo su nombre, en medio de Brooklyn, después de que un taxista capullo me robase cincuenta dólares por un recorrido que no debiera haber costado más de quince (los taxistas son iguales en todas partes, me parece a mí). Y así fue como conocí a William.

     Ahora que miro para atrás con más distancia, me doy cuenta de lo bueno que fue William conmigo, pese a nuestras más que evidentes diferencias. Él no tenía más oficio que la vida, y su alquiler lo pagaba realquilando sus habitaciones a otros inquilinos, y así fue como yo llegué allá. Día tras día fue guiando mis pasos, y así conseguí en un día y medio tener móvil propio y dominar el arte de la lavandería, que lo cierto es que daba mucho más juego en aquella serie llamada "Melrose Place" del que me dio a mí. Incluso me llevó por el ambiente Newyorkino, pero todas nuestras excursiones terminaron en lamentables caminatas e inimaginables colas. Más de un día me daba abrazos, pero cuando sus abrazos terminaron en magrearme el culo tuve que poner las cosas con un poco más de distancia :P

     En la otra habitación de las tres que teníamos en la planta vivía Jennie. En realidad nunca supe bien cómo escribir su nombre. Era una mujer de Missisippi, de unos cuarenta años, que estaba escribiendo una obra de teatro de la que jamás quiso desvelarnos nada. Con ella solíamos pasear los domingos, mientras a lo lejos escuchábamos los cánticos de las misas Gospel. La buena de Jennie era tan sobredimensionada que durante los dos meses que estuvo con nosotros tuvimos que cambiar tres veces la tapa del water, pero aún así a ella le encantaba pasear. Por ella estuvimos una tarde entera intentando conseguir unas entradas gratuitas para ir a ver Wicked, el musical (que terminamos viendo en Chicago, pero eso es otra historia). Con ella, también, teníamos largas conversaciones en aquella cocina mientras William engullía sus alitas de pollo y yo me hacía una ensalada o tomaba unos frijoles. 

     Finalmente, un domingo a las ocho de la mañana, Jennie entró en mi habitación. Su tren de vuelta a Missisippi partía en media hora. Me dió un beso de despedida y me dijo que me había dejado un regalo encima de mi mesa. Cuando me levanté, encontré una biblia mormona en mi escritorio.

Thiago

     Y es que os iba a hacer otro post de temática completamente diferente pero no lo haré para que no llegue Rosa a chafarme diciendo que hago trampas para postear tanto (ay, Rosiña, esto no es trampa, es marketing!). Así que como ya me estoy especializando en hacer un post chorras al día para deleite (o exasperación, no lo tengo claro) de Irene que me dice que hago posts de los de "no se sabe de qué iba" voy a hacer un post sobre lo comentado en el post previo, que así además igual os da por revisar los comentarios y me subís las estadísticas que están más tiesas que la mojama (que es lo único tieso que tengo a mano desde hace mucho tiempo si no tenemos en cuenta mi propia anatomía).

     Iba, decía, a hacer un post sobre Ofiuco, que me enteré el sábado a las dos de la mañana (bueno, en realidad durante la noche del viernes, pero es que yo no tengo la culpa de que el lenguaje sea tan absurdo), pero me lo han chafado porque ya lo ha posteado alguien que ahora mismo no consigo encontrar (por qué no lo habré anotado en un papel? Quien seas, manifiéstate!!!) y eso ha hecho que mis predicciones para el 2011, mi entrada más exitosa (ya va por las 704 visualizaciones, es increíble lo que hace la gente para no aburrirse) sean todas una mierda y, de paso, la canción de Teresa Rabal -o quien fuera- que me inspiró a hacerlas., también Claro que para predicciones desacertadas hay gente que me supera con creces, jajaja.

Foto robada del verdadero Thiago
     Y es que hay una dura puja entre Merche Pallarés y Romek (lo siento, queridérrimo, pero no pienso deletrear un apellido que nadie sabe cómo se pronuncia) por ver quien delira más a la hora de adivinar el oscuro secreto que me une a Thiago, que de tan oscuro ni yo mismo lo sé. Y como Thiago se ha quejado de que no lo menciono ultimamente, voy a poner su nombre de título a este post y todo porque digo yo que si él puede dar carnetes plateados por qué no voy yo a poder regalar un post con el nombre de a quien a mí me dé la gana. Además, que así me saco el marrón de encima y relleno otro post que siempre viene muy bien. El asunto arranca de cierto día en que la buena de Merche (que al parecer había desayunado anís de guindas) dedujo que Thiago y servidor éramos en realidad la misma persona (cosa imposible porque todo el mundo sabe que lo que yo hago no es surf sino otra cosa de nombre desconocido). Y ayer Romek, en un alarde del que aún debe estar recuperándose, me ha emparejado con Thiago, que hombre, no está mal, pero la verdad, para buscarme un novio prefiero uno que no me quede a 600 km. ¡Pues anda que no me he reído yo ni nada! 

     Tranquilo, Thiaguín, no es por tí, que yo encantado, es porque no podría hacerle eso a toda la legión de fans (la tuya, of course) que se me echarían encima como perras rabiosas... claro que lo mismo así aumentaba mis estadísticas (eso es algo sobre lo que debo meditar más). Además, que yo también he vuelto a consultar mi bola de cristal y me dice que tú, en realidad, eres una señora de 70 años que se ha cansado de tricotar, jajaja. De momento, creo que haré otro post más concienzudo para mañana a la mañana postearlo... y tú, mientras tanto, vete a ver si encuentras a tu abuela, que creo que se ha disfrazado de alien y se ha colado en la habitación de un tal Omar...

PD: Y aunque no venga a cuento, buscando una foto para el verdadero Thiago he encontrado esta placa de una calle de nombre real que está en Cifuentes y que tan bien explican en este blog , que a su vez lo ha copiado "inmisericordemente" de este otro. Si os queréis echar unas risas, ya sabeis, clickad y aprended. Si es que este mundo es la polla no, la repolla, jajaja.

lunes, 24 de enero de 2011

Del amor y otros cuentos

     Para que Me vea que también sé hacer posts concienzudos y meditados, y ahora que ya me he actualizado en mis deberes blogueriles (como siempre digo, llego tarde pero llego), voy por fín a ponerme a pensar. Aunque en realidad este post lo tengo medio hecho a base de los comentarios que he ido sembrando por ahí, porque es algo de lo que ya pensaba hablar desde hace un tiempo.

     Hoy me llamó una amiga, X, que se va a casar y está ilusionada viendo la ilusión que le hace a su marido y familia (ella es menos de esos trámites pero en el fondo supongo que también está encantada). En medio de la charla, me dice que menos mal que yo no tengo pareja estable (¡cómo si la tuviera inestable, je!) porque todas sus otras amistades se han ido alejando un poco a medida que se han arrejuntado con sus respectivos. Pero de eso podría hacer otro post que me lo guardo por si acaso.

      Después de esa conversación con mi flamante nuevo teléfono que tan buenas fotos hace, y mientras veo el final de Piratas del Caribe 3, donde se descubre la tierna y desgarradora historia de amor de David Jones y su corazón arrancado, me voy a leer a Pimpf y me encuentro un post hablando de los cumpleaños no ya de su ex, sino de sus exes, cuánta X tiene este post, por cierto. Mau, en su blog, media hora más tarde -que fue cuando lo leí- comenta una anécdota de su reinicio a la vida social tras su ruptura sentimental de un tiempo atrás. Como le decía a Fiebre en el post que ha puesto hoy, ay, el amor, l´amour, qué será-será lo que tiene, que hace al mundo girar... ¡Si hasta Romek en sus relatos se pone a pensar en matrimonios! Y así me encuentrais ahora, pensando en las parejas y sus evoluciones.

Reflexiones

     Queridos lectores y seguidores casuales (o era al revés?), soy drogadicto. Y mi droga se llama blog. Soy tan vicioso que ya no me llega con uno, dos, cuatro o diez, no. sigo tantos blogs que ya les pierdo la cuenta, así que me hago seguidor en ellos (en los que puedo, claro, no todos tienen esa opción) y el rollo es cuando uno pasa más de un día sin atender un par de horas al ordenador, que se te junta una jartá de trabajo que no hay manera de limpiarlo luego. 

     Así que hoy he dejado mi casa sin limpiar, toda ciscada de las cosas del surf (que ya bastante lata es limpiar el traje) y me he sumergido por las webs alante. Tengo ahora mismo un batiburrillo de ideas en la cabeza que podría escribiros diez posts  y quedarme tan ancho como un tanque. Pero no lo haré, porque también, como buen domingo, estoy un poco plof, supongo que será cosa de la resaca. 

     Iba en realidad a haceros un post que te cagas sobre el amor y esas cosas, pero antes de ponerme, y mientras reordeno mis ideas mentales, me ha salido este churropost que os voy a colgar ahora mientras tecleo el siguiente que programaré para unas doce horas más allá. Que tengo que subir, por cierto, mi número de visitas, desde que veo que la gente tiene blogs de -casi- 400000 visitas y ya me da hasta vergüenza poner las visitas del mío (que encima, como una vez me dijo Romek, seguro que la mitad son mías), jajajaja. Dicho sea, enhorabuena, Álvaro, por la cifra.

     Y para dejaros termino con una frase que acabo de oir en la pelicula que estaban poniendo en la tele (nunca pensé que de piratas del caribe pudiera sacar una frase tan hermosa y más viniendo de Keith Richards que tuvo que posponer el rodaje después de caerse de un cocotero, me encanta esa anécdota) "No se trata de vivir para siempre, el truco es sobrevivir con uno mismo para siempre".

domingo, 23 de enero de 2011

Sobreviviendo

     Ayer salí para celebrar el cumpleaños de un amigo. Cierto que también quería estrenar mi ropa nueva que gracias a las rebajas adquirí. Y no es porque lo diga yo, pero iba muy, muy guapo. Claro que si no lo digo yo, no me lo dice nadie. 

     A la segunda copa (tomé cuatro y ya me ha costado levantarme hoy) mi amigo del cumpleaños se fue a fumar y se hizo un amigo (esto de fumar está muy bien para aumentar la vida social, terminará todo el mundo haciéndose fumador, verás tú). El caso que a su regreso nos presentó a los amigos de su nuevo conocido. Entre ellos, por cierto, un chaval bastante mono pero más seco que una uva pasa. El caso es que el simpático del nuevo conocido me terminó diciendo cuando nos presentaban que a mí ya me conocía "porque tú eres una clásica del ambiente". Yo, que salgo más bien poco y que encima nunca me como un colín, terminé bastante cabreado, así que he decidido que no volveré a salir por voluntad propia por el ambiente coruñés. Y tras una profunda reflexión con mi cama, vienen a mi boca las palabras de Vivian Leigh en la mítica escena de "Lo que el viento se llevó": "A Dios pongo por testigo... a Dios pongo por testigo de que no lograrán aplastarme. Viviré por encima de todo esto y cuando haya terminado nunca volveré a saber lo que es hambre. No, ni yo ni ninguno de los míos. Aunque tenga que estafar, que ser ladrona o asesinar... ¡A Dios pongo por testigo de que jamás volveré a pasar hambre!"

     PD: Stultifer, tengo una foto esperando para dártela. Pero no sé tu mail, claro que lo mismo hay manera de enviártela sin que me lo dés, pero yo la desconozco. Si no me dices cómo la termino poniendo en el blog y ya tú con ella haz lo que quieras, pero entonces perderás la exclusiva, juajuajuajuajua.

sábado, 22 de enero de 2011

Turisteando

     Mierda! Esto de escribir un post en un nuevo movil es imposible gracias a mi inutilidad. Bueno, segundo intento. Decia que es muy dificil escribir un post desde un nuevo movil cuando el anterior tenia 4 años y lo de la wifi es un mundo completamente nuevo (eso no era una consola para hacer deporte?), porque mi paleomovil estaba ya casi fosilizado. Bueno, vale, es una excusa para que no se me queje nadie de que hago posts breves (lo cual no dejaria de tener su gracia).  
 
     Hoy, para celebrar lo de los moviles (somos tres los que hemos renovado nuestras comunicaciones, y ya se sabe, sabado sabadete, movil nuevo y... polvete?) nos fuimos de ruta turistica a Betanzos, la ciudad de los caballeros -asi es como la conocen- aunque yo no he visto a ninguno. A cambio, termine duchado en cerveza (o una clara de limon, siendo mas exactos), y nos fuimos de paseo a los jardines del pasatiempo, una maravilla donada por los hermanos Garcia Naveira y construida en 1893, que aunque lleva años en rehabilitacion esta un poco cacarañoso. Es una obra llena de galerias subterraneas, tuneles, grutas, terrazas y jardines, que si estuviera en una gran ciudad sería conocida como yo conozco el parque Güell o el Retiro, y de la que he rescatado una foto que le pasare a Stultifer que le gustan estas cosas, si antes -claro- consigo saber como enviarsela. 

     Que yo me quede pensando que cualquier dia este sitio se vuelve un lugar de cruising oficial. Lo mismo por eso lo cierran a la noche. Claro que si yo fuera alcalde tambien lo propondia como botellodromo. 

Todo lo que rodea al capital parece aquí demasiado legal


      Total, que al final terminamos en un atasco cantando "ahora que vamos despacio vamos a contar mentiras trailará" y canciones tradicionales gallegas de las de recochinadas tipo "unha vella por falta de macho meteu na cona un pau dun sacho" que paso de traducir para no herir sensibilidades. Y para herir, pero en este caso, corazones, os dejo que voy a apuntalar un poco el edificio de mi cuerpo para que se cumpla el refrán sabadetero aplicado al movil nuevo ;P

El regreso de una dama

     No soy muy amigo de colgar vídeos musicales, porque los gustos son algo muy personal y porque estaría todo el día poniendo vídeos de Tina Turner, y no es plan. Pero claro, hay circunstancias especiales que merecen ser narradas, y sobre todo en estos tiempos tan difíciles hay que potenciar las noticias agradables. Porque Z, como la Agrado de "Todo sobre mi madre" está aquí para haceros la vida más agradable (pero sin sexo, eh, que ya decidí pasar del asunto como he contado en el anterior post).

     Anteayer, en Salamanca, cochinillo mediante, se produjo el reencuentro de una de las damas de la canción con su público. En realidad, ya había aparecido por sorpresa en una gala benéfica del teatro Real a finales de año. Os hablo de mi paisana Luz Casal, la roquera indomable.

     No es que me guste especialmente su música (de hecho probablemente sea más apta su voz para los boleros y canciones más lentas que para el rock), aunque tiene canciones memorables que quedan en la memoria colectiva: desde el Loca hasta el Piensa en mí que inmortalizó Almodovar (qué Almodovariano está quedándome este post), pasando por el siempre enigmático Rufino (enigmático porque el único Rufino que yo conocí en persona era de todo menos marchoso, conducía su coche a 30 km/h hasta que le multaron por ir demasiado lento). Sin embargo es una tipa que siempre me ha caído bien.

     Tuve la suerte de que mi amigo P. que tanto me maltrata y me quiere a partes iguales me invitase a verla en una ocasión, durante el rodaje de un disco en directo del grupo "Luar na Lubre", así que, bien mirado, ya he colaborado en un disco y nunca me acuerdo de ponerlo en mi currículum. Os dejo con el vídeo de su hermosísima actuación cantando una canción tradicional gallega (pidió perdón dentro de su modestia porque dice que no habla gallego, como si la mitad de los presentadores de la telegaita lo hablasen...), aunque no le hace justicia al mágico momento que aquella tarde vivimos todos en aquel teatro. Hay personas que transmiten cosas desde el mismo momento en que pisan un escenario. Y Luz Casal es una de ellas.

viernes, 21 de enero de 2011

LO QUE SÉ DE LOS HOMBRES: Sexo

     Ha llegado el momento de celebrar por lo grande las primeras cincomil visitas de este cutreblog. Así que va siendo hora de entrar en materia. Me propongo hacer el post más celebrado de todos los posts que en la blogosfera han sido, ahí es nada. Cómo? Pues hablando de lo que todo el mundo quiere hablar siempre (el sexo) pero diciendo lo que nunca nadie se atreve a preguntar. 

     Bueno, vale, soy un poco excesivo, pero es que me viene a la memoria el día en que estaba con un amigo y unos amigos suyos, fue en cierta tetería hará unos cuantos años. Allí estábamos con nuestros humeantes tés delante cuando de repente una amiga de mi amigo lanzó al aire la siguiente pregunta: "lo que yo no entiendo es cómo reaccionan los gays cuando alguien... cuando... bueno, a ver si me explico. Cuando tienes sexo vía anal, pues... que eso puede manchar, y... eso" y se puso toda colorada dándose cuenta de que, en parte, era un poco una impertinencia. Un amigo de mi amigo respondió algo del estilo "a mí nunca me ha pasado, pero supongo que sería cuestión de limpiarse y seguir". Todos nos miramos unos a otros y ahí quedó la cosa. 

     Ahora que ya somos mayores y ha pasado el tiempo, creo que ha llegado el momento de sincerarse (¿o quizás no tanto?). Porque todos somos un poco cíclicos, o al menos eso creo, y alternamos entre etapas asexuales (yo llevo ni se sabe cuánto en una) y fases de pendón desorejado. La última mía fue hace no tanto, pero me llenó la memoria de historias para no dormir, de esas que nadie cuenta en una entrevista de trabajo pero que ayudan a forjar un carácter (esta frase no venía muy a cuento pero siempre me ha gustado decirla). Mi última época pendón comenzó hace aproximadamente un año, cuando me llevé a la cama a un amigo con el que había tonteado en unas cuantas ocasiones a lo largo de varios años. Todo iba muy bien, todo era muy dulce, todo estaba genial. De repente, en la cama, desnudos ambos, me mira a los ojos, me besa, y me dice "es mejor que lo dejemos aquí, tengo diarrea" y se fue al baño. 

     No contento con ese primer fracaso, con fruición busqué de modo desesperado el polvo perfecto; si en el amor no había sitio para mí, tal vez tendría que haberlo en el lecho. Y descubrí... descubrí que tampoco, para qué engañarnos. Otra quedada en esta última época pendón fue con alguien de quien no había visto más que unas fotos en una charla por el msn. 

     Maaaaal. Muy mal. Ahora entiendo el consejo de los padres cuando dicen que no quedemos con extraños.. Menudo fiasco cuando llegué a aquel dúplex. Lo que pasa que bueno, a las tantas de la mañana y puestos en faena... en fín, entre esa quedada y alguna otra, me acostumbré a ser como un escayolista que iba tapando orificios, saltando de uno a otro y poco más. Ser al sexo lo que una ONG a la colaboración internacional, Zetapolvo a domicilio, no sé. 

     Obviamente, terminé cansado de aquella etapa. Más que nada porque era tan tarde todo ese movimiento sexual que aunque se me estaban poniendo los abdominales como una tableta de chocolate, a la mañana siguiente terminaba derreado. Lo malo es que terminé en una competición con una amiga por ver quién era más desorejado de los dos. Afortunadamente, ganó ella. 

     Ganó porque el colmo de mis shocks sexuales llegó con una de mis últimas quedadas. Fue cuando me planteé si tendría un tumor en la cabeza. Aquel día batí mi propio record de lamentabilidad. En serio... bueno, a ver, estaba en mi casita con mi maldito perfil del bakala (por qué me habré hecho yo eso) cuando me llega un mensaje de alguien que me dice si quiero quedar para follar. Yo siempre digo que no. Pero mi ONG abrió sus puertas y dije "hombre, si estás muy bueno...". Y me responden "estoy bueno". Uhm, me digo yo, a nadie le amarga un dulce. el caso es que por h o por b terminé quedando a las diez y pico de la mañana con el elemento. Elemento es demasiado positivo, por otra parte. Como no sabía ni siquiera su nombre (sigo sin saberlo, dios mio me he tirado a un tío -otro- y no me sé su nombre...) le llamé X en mi agenda, un apodo muy adecuado dado el motivo por el que nos conocíamos.

      Así que a las diez me llamó, yo tendiendo mi ropa todo feliz, y bueno, le digo que paso de llevarlo a casa, que si quiere quedamos para tomarnos algo, yo en plan pensando, pues nada, ya que vamos a prostituirnos al menos seamos profesionales, primero hay que ver la mercancía. Y tal y como yo sospechaba, la mercancía apestaba... El caso es que estuve hablando con él tomandome una cerveza y no me preguntes cómo, terminamos en el salón.

      Claro que si aún quieres que me quede un poco de dignidad deja de leer aquí.

      Cabrones! Bueno, pues nada, llegados al salón, pongo la tele, música ambiental, y empieza "y bueno, qué eres, activo o pasivo" y yo, "activo, activo". Pues muy bien, me digo yo, ahora te vas a enterar, por cabrón, y por mentir diciendo que estas bueno y demás te voy a reventar el culo a morir porque a mí esto no me va a gustar pero a tí tampoco. Y empiezo con el pimpampum y exactamente eso, pum, ahí que me saco los preservativos, ahí que empiezo con mi tarea, ahí que el otro se emociona y ahí que... veo su anillo de casado. Y más que me cabreo, y más que me concentro, y más que grita el otro que se va a correr, y de repente... uy qué peste.

      Dejaré que te recuperes del shock y del ataque de risa antes de seguir escribiendo...

      No, ni de coña te ha pasado ya el shock

      Y mucho menos el ataque de risa.

      Y así fue como sucio (por dentro, y por fuera) decidí terminar con mi última época pendón.
 
      PD: : No puedo entender cómo a alguien le gusta la coprofagia. PUAAAAAAAAAAAAAJJJJJJJJJJJJJ.

jueves, 20 de enero de 2011

5000 (+63)

     Faltan exactamente dos horas para que haga 41 días que empecé con este blog que hoy ha llegado a las 5000 visitas. No tengo ni idea de las visitas que es normal que tenga un blog, ni diarias (ayer batísteis el récord, 310), ni semanales, ni por supuesto anuales. Pero lo cierto es que, mientras ando aún en shock al descubrir que Inés Alcántara se nos ha vuelto yonki, supongo que llega el momento de recapitular que es un ejercicio que viene muy bien de cuando en vez. Llevo publicados 70 posts, lo que casi hace una media de dos al día. He intentado hacerlo lo más variado posible para no repetirme, pero es que a veces se acaban las ideas. No es que vaya a dejar de hacer mi blog, no, ni loco! Es sólo que en ocasiones (muchas) temo pecar de ególatra y en otras (aunque menos) de aburrido. Todo lo que he leído sobre los blogs indica que suelen tener una temática, aunque sean personales (supongo que éste debería encajar en esa clasificación). Suelen tener también un objetivo. El mío, como confesé en el primer post en un momento de clarividencia, era conocer a Thiago y a Sakis Rouvas, pero no se ha producido ni lo uno, ni lo otro. Bueno, al menos de Thiago tengo comentarios, pero Sakis, si lo estás leyendo no te molestes que el griego que yo domino (ejem) no sé si será el que tú hablas. Además, debería añadir tanta gente a esos dos... Porque una de las razones por las que me organicé un cutreblog fue conocer gente, no con ánimo de quedar o ligar, sino simplemente de hacer mi vida más interesante. Creo que en eso, al menos, no he fallado. 

     Pero me está saliendo un post demasiado íntimo y bastante ñoño, así que sólo quiero daros las gracias a todos y cada uno de vosotros, comentaristas, seguidores (+1 incluído, jajaja), bloguers que parasito y amigos de carne y hueso que os reís de mis fotos ligerito de ropa para terminar cabreando a vuestros novios (esto último lo digo porque siempre sube la moral). Así que para celebrarlo os voy a regalar en unos minutos el post más sincero que he escrito por ahora. La verdad absoluta sobre lo que todo el mundo quiere saber y nadie se atreve a preguntar sobre el sexo. Pero eso, claro, será después de que lo haya escrito ;P

     GRACIAS POR HACER MI VIDA MÁS DIVERTIDA.

Destitulado

     Anonadado me hayo desde que ayer descubrí que mi nick puede ser tenido en cuenta como parte integrante de una banda delictiva mexicana de la que uno de sus dirigentes cayó ayer víctima de una redada policial. Los Zetas, al parecer (Wikipedia dixit) se dedican nada menos que al robo de coches, extorsión y secuestro. Ahí es nada.

     Tan asustado me dejó la situación que ya me imaginé a sus correspondientes hackers indagando mi pasado por el blog alante. Y como no quiero pensar en ello porque me da yuyu, me fui corriendo a leer las noticias de hoy. De todas ellas, no voy a comentar la economía, ni las broncas políticas ni nada de todo eso que puede pasar en cualquier sitio, no. Os enlazo esta noticia de "La voz de Galicia" para que veais cómo se las trata aquí la policía y la empresa de autobuses muninipal (Compañía de Tranvías de La Coruña, es su nombre entero). Resulta que un buen día un conductor a punto de ser arrollado por el autobús se dió un topetazo contra otro vehículo estacionado (cosas de que los Zetas no actúen en mi país). Para reclamar hizo una fotografía de la matrícula del autobús por la parte trasera, pero al llamar al día siguiente la compañía de Tranvías le explicó que aquel autobús no existía. Quiso la diosa fortuna que lo volviera a encontrar al día siguiente, y comprobó que realmente tanto el número del autobús como la matrícula coincían. Finalmente descubrió que la matrícula delantera y la trasera no coincidían, dio aviso a la policía local y ésta lo ignoró completamente.

     Así que el bueno del señor ha hecho un fotomontaje y lo ha enviado al periódico. ¿Alucinante? Sí. Pero si en esta ciudad podemos tener un martillo hidráulico perforando la calle durante un par de semanas todas las noches desde las once hasta las siete y media de la mañana (tan real como os lo cuento), no sé por qué nadie se va a sorprender...

Viaje al futuro

... o "Cuento a propósito de la Ley Sinde"

     Ricardito Castro era un niño muy espabilado. Algo alocado, muy preguntón, un poco traste y bastante hablador. Un día, estando en el colegio, la CPU maestra (habían pasado ya prácticamente cien años desde que aquel primer prototipo de escuela sin maestros se había puesto en marcha en lo que por aquel entonces se llamaba Florida) explicó la regulación de la red que interconectaba el mundo, el por qué había que pagar por las consultas y descargas de datos, la restricción de acceso a la información y cómo la ausencia de regulación estricta había abocado al cierre del primer proyecto similar que había existido un siglo atrás, y que se conocía como el "colapso de la revolución internet". Mientras la CPU maestra exponía gráficos y diagramas, melodías y luces de todos los colores se proyectaban sobre la pantalla digital tridimensional, Ricardito se revolvía nervioso en su asiento. Finalmente, haciendo acopio de todas las fuerzas que un niño inconformista de apenas 12 años podía tener, pulsó el botón de pregunta, señalado por una tecla roja.
     De la unidad central de procesamiento maestra surgieron varios chisporroteos, y la proyección tridimensional se interrumpió momentáneamente, pasando por unos minutos a publicidad. Mientras un anuncio de Lipoesbelt mantenía ocupadas las mentes del resto de los niños de clase (la mayor parte de ellos concebidos mediante selección genética de sus progenitores, para lograr un mayor coeficiente intelectual y un mejor rendimiento en pruebas físicas), la CPU se dirigió al pupitre electrónico de Ricardito dispuesta a responder a su pregunta. "¿Dime, Ricardito, cuál es tu duda?"

     -Verá, señor CPU. No entiendo los motivos que llevaron al conocido como colapso de la revolución internet. Bueno, yo, en realidad, es que no entiendo por qué era una revolución...

     -Internet, mi querido alumno, era una red de acceso a la información que conectaba múltiples ordenadores por todo el mundo, similares a mí mism@ aunque obviamente mucho más rudimentarios. Se denominó "Revolución" porque, antes que ella, la gente accedía a la información consultando en grandes edificios llamados bibliotecas (hoy día los hemos reciclado en centros comerciales y gimnasios en su mayor parte), y durante el tiempo de ocio, lo único que existía eran juegos tradicionales, concursos de bailes regionales y una cosa que llamaban televisión, muy similar a la Tridivisión que hoy día tenéis en vuestros domicilios

     -Pues vaya aburrimiento. Sigo, de todos modos sin entender por qué se "colapsó" todo aquello si tan bien estaba.

     -Sencillamente, Ricardito, porque todo era gratis. La gente robaba información y los productores dejaban de tener beneficios, así que finalmente los gobiernos decidieron cerrar internet y refundarla en la red que hoy día conocemos. 

     -Pero no es posible... - exclamó Ricardito, abriendo los ojos hasta que casi se le salían de las cuencas- ¿Cómo iba todo a ser gratis? ¡Así no habría forma de que los músicos pudieran vivir, o que los actores pudieran cobrar sueldos por sus trabajos! ¿Está usted bromeando? ¿No tendrá algún circuíto suelto, CPU maestra?

     -Ya ves, Ricardito. Es tan obvio que cae por su propio peso! ¡Sería tan absurdo como pensar que aquello que en aquel entonces se llamaba televisión hubiera alguna vez podido ser rentable! Por eso se sustituyó por la TDT de pago y, finalmente, por la Tridivisión que hoy día poseemos. ¡Estaban locos nuestros ancestros! ¡Cultura gratis, y generando beneficios!

     Ricardito Castro se volvió a sentar de nuevo, cómodo, en su asiento, y continuó atendiendo con fruición a la nueva lección de la CPU maestra. Ésta sí era gratis, generosamente donada por el Sindicato de Empresarios.