domingo, 31 de julio de 2011

Reflexiones de Water I

... pero a mí me parece que iba mona.
     ¿Por qué no soporto a la gente rica? Es algo que va más allá de la insana envidia, porque el dinero con el que naces es como la polla, hay que aprender a vivir con lo que te ha tocado y gestionarlo lo mejor posible. Lo que me fastidia es ese sentimiento de pertenencia a un mundo paralelo que transmiten los ricos (hablo de ricos de verdad, no burguesitos acomodados, eh, esos evolucionan a pijos sin más), en el que los problemas más importantes pueden venir de no saber combinar el traje de equitación con la pamela de la acompañante, elegir bien el pañuelo que va con la corbata, o estar a la última en el cocktail de moda. Estos días se está celebrando en Arteixo, ayuntamiento al lado de Coruña y con el que forma parte de una gran conurbación metropolitana (entiéndase el "gran" en términos galaicos, la región urbana coruña-ferrol apenas llega a los 600.000 habitantes) y sede del imperio - emporio Inditex, matriz de Zara, Pull & Bear, y Massimo Dutti, entre otras (no es cuestión valadí, pues es Don Amancio quien organiza el evento), se está celebrando, decía, el Concurso Hípico de Saltos "Casas Novas", al que acude la flor y nata de España y parte del extranjero y que yo me lo imagino como una especie de Ascott peninsular. Aunque en Ascott no sé si premiarían al novio de la hija de quien organiza el cotarro, pero vaya usted a saber...

Reflexión del día (I): "Cartera y gusto tienden a seguir caminos inversamente proporcionales."




Martita Ortega y su maromo jinete, dándose arrumacos

     Es revisar cualquier álbum de fotos de los que publican los medios y venírseme a la cabeza la reflexión del día de hoy: La cartera y el gusto prácticamente nunca siguen el mismo camino. Si tienes buen gusto, tendrás mal la cartera, y a la inversa. Porque.las cosas buenas y bonitas son, por lo general, más caras, y porque, en general, el vivir en los mundos de Yupi hace que los ricos tengan un gusto que en ocasiones llamaré "exótico" (¿recordáis la taza de inodoro que llevaba Beatriz de York en la boda de su primo?). Claro que afortunados ellos que pueden permitirse achuchar la Visa sin que les duela el corazón.

     Lo que de verdad no entiendo es por qué a la gente le interesa la vida de este tipo de personas. Porque o yo estoy muy engañado, o la vida del resto de las personas a ellos les importa más bien un pito. Lo que me lleva a la segunda reflexión del día:

Reflexión del día (II): "El interés por la vida ajena es inversamente proporcional a la cuenta corriente del individuo"

     Y como le estoy pillando gusto a esto de reflexionar, voy a inaugurar una nueva sección en este mi blog, que también es vuestro, y que llamaré "reflexiones de Water", en honor a la Princesa Beatriz y porque, además, hay que reivindicar la productividad que produce el tiempo invertido en cagar, que es algo que todo el mundo hace y de lo que nunca nadie habla. Incluídos los ricos.

viernes, 29 de julio de 2011

Este post es un bombazo

     Qué desastres organizan los traductores automáticos! Buscando una foto para este post (teclead en Google imágenes "hacer una bomba graciosa", y os saldrá en la segunda página), me encontré con una página que ha trasnformado la sinopsis de una película llamada "lluvia de hamburguesas" en una especie de jeroglífico egípcio para iniciados... Y diréis vosotros que qué más os dará o a qué vendrá todo esto... bueno, todo tiene su explicación:

     Conversando con una amiga sobre la masacre de Noruega -sin comentarios salvo decir que, en mi opinión, ese hombre no está en absoluto loco, sino que es un fanático con serios problemas de trastornos de la personalidad, no sé qué opinarán los psicólogos y psiquiátras- nos pusimos a elucubrar cómo se podría hacer una bomba con fertilizantes. Y claro, llegamos a la conclusión de que en Google se encuentra de todo. Siguiendo la sabiduría popular gallega y ese refrán que reza "meu dito, meu feito", nos pusimos a buscar por Google... y vaya si encontramos. A ver si no me cierran el blog por este post!

     Pasando de largo por las páginas webs de apoyo a ETA (más que nada, porque supusimos que estarían en vasco, y de euskera creímos tener conocimientos más bien nulos), que las hay, terminamos en una página de la que, lo más simpático, fue el comentario de un lector, que dijo que existen también las bombas suicidas, te tomas un litro de gasolina, y luego te fumas un cigarro. Aunque no os perdáis tampoco la explicación de cómo hacer una bomba de tubo con cerillas, no tiene pérdida (sí, sí, con cerillas!). Si es que hay gente que hace chiste hasta con estas cosas tan macabras. Ah, y la coña más grande aún, es que el mismo texto, o casi (no me lo he leído entero, vaya) lo puedes encontrar en otro enlace, tal que aquí. Y no he querido seguir buscando...

     ¿Sabíais que el Napalm es en realidad una mezcla de jabón y gasolina?

     En fín, que al final nuestra indagación confirmó nuestras sospechas, los que quieran hacerse una bomba sólo tienen que molestarse en buscar un poco. También recuerdo el día en que una profesora de química en el instituto nos habló de la "pólvora casera", que necesitaba azúcar glass y "un par de cositas más", para que luego digan que los dulces no son peligrosos. 

     Claro que cuando se lo comenté en el trabajo a un compañero, éste me habló de que su hijo un día le llegó con un impreso de un magazine editado por Al Qaeda llamado Inspire, que ya es lo más, con lindezas del estilo "Cómo hacer una bomba en la cocina de tu madre" y cosas por el estilo... no sé si me asusta más que existan esos panfletos de nombre tan subterfugísticos... o que algún día un hijo te pueda venir con uno de ellos en la mano!

     Si total, para qué vamos a engañarnos, lo único bueno que tienen las bombas es su parentesco con la palabra bombero, que lo que te incendian es el corazón (y otras cosas que no son el corazón) y pueden apagarte el fuego a manguerazos... Y espero que no me censuren el blog que esta foto es informativa de cómo protesta el cuerpo (debiera decir los cuerpos?) de bomberos en esta mi Marineda no natal.

     Y esto, ya para terminar con algo de humor menos negro chamusquina, me recuerda al día en que fuí a un McDonalds en mi primer viaje por tierras extranjeras, cuando fui a pedir un McChiken (en Spain, McPollo), y me pedí un McKitchen (que en román paladín vendría a ser algo similar a una McCocina). La cara de "¿Me estás puteando?" del dependiente, no tenía precio. Los colores que subieron a la mía, ni os cuento.

martes, 26 de julio de 2011

I´m not lost... pero casi

     Haciendo juego con el antíguo nombre del blog de Brekiaz, al que muchos de vosotros ya conoceréis (sobre todo teniendo en cuenta que quienes leen mi blog bebéis casi en exclusiva de las mismas fuentes que yo mismo, jeje), escribo este post a modo de disculpa. Bueno, vale, disculpa tampoco, porque yo no me siento culpable por no postear, es simplemente que he estado de vacaciones en Asturias hablando con mi abuela y eso conlleva el aislarse bloguerísticamente. De todos modos, me sorprende que haya quienes reclamen mi presencia por aquí porque si no posteo es, entre otras razones, porque no tengo ya tanto tiempo para ir por los blogs ajenos leyendo y, sobre todo, comentando, y eso supongo en realidad que es lo que más nos gusta a todos los que tenemos un rinconcito en internet, el que alguien mire para nosotros y diga, bah, pues no está tan mal (y sin tener rincón en internet nos gusta igualmente que nos miren, aquí que nadie se las dé de div@).

     Tanto es así que nos gusta que nos miren, que el mundo gira en torno a la belleza, y sino que se lo pregunten a Patricia Ordaya, presidenta de una asociación de vecinos que son la ostia (literalmente, son la Asociación de Vecinos de L'Òstia), y que en un reportaje de El País en su edición catalana (cuyo enlace os dejo aquí) se quejan de que ahora les ponen trabas para hacer nudismo allá por la Barceloneta. Parece que incluso le echan la culpa a un tal hotel W del que yo no había oído hablar, pero es que yo de hoteles sé más bien poco, que de eso se encarga normalmente mi manager. Vale, esto era un chascarrillo, pero por un momento me acabo de sentir como Carmen Lomana, ¡¡¡horror!!!


No sé si la reflexión que me produce esta foto es que el nudismo puede ser peligroso, o que la ausencia de sujetador hace que se te depeñen las domingas.

     Personalmente, esto del nudismo no lo veo ni bien, ni mal, porque en realidad a las playa (nudista o no) no voy a tomar el sol (por eso no lo veo), pero supongo que dependerá de quién se te despelote delante. Que si tienes un grupo de jóvenes efebos pues lo verás bien (y sino, vete al oculista) y si son decrepitudes con las cachas al aire pues lo verás menos bien, claro. Yo, la verdad, eso de tostarse al sol lo veo falto de sentido y, si me apuras, parece traslucir incluso un cierto punto de racismo, porque ya estoy harto de que todo el mundo me diga en verano que tengo aspecto de enfermo por lucir mi piel lechuguina, como si fuera obligatorio ponerse moreno. Las playas están muy bien cuando no hay una masificación, pero pegarse la paliza buscando aparcamiento para ir como un borrego a tostarse al sol y aguantar los pelotazos del crío de los de al lado simplemente porque es lo que todo el mundo hace me parece tan absurdo como ir al Dux para salir por la noche (y esto requerirá su explicación, claro, pero como da para otro post lo dejo esbozado y en días venideros os lo cuento).

     Y al final me he liado y no os hablé de lo que realmente quería hablar, que era de la de cosas que uno puede encontrarse por internet. Pero como me ha quedado un post suficientemente aceptable, pues me lo guardo para otro día y así por el precio de uno, me he hecho casi tres posts, jajajaja. Conste que lo hago para que Thiago vea que intento cumplir aquella ley del número plateado (¿o era la proporción aurea?). Aunque, claro, ya se sabe que lo de someterse a normas no es algo que vaya mucho conmigo.

domingo, 10 de julio de 2011

En ocasiones... me ven

     Desde que el mundo es mundo... bueno, no, desde que yo conozco los blogs, eso está mejor dicho, existía un faro en esto del posteamiento que se llamaba Thiago. Hoy quiero rendirle un homenaje a ese bloguero hoy día en proceso de desaparición copiándole una idea que, en realidad, me ha venido entregada con un lazito, o mejor dicho, con dos. Y es que si habíay algo que caracterizaba su blog era las imágenes que de él iban enviando otros blogueros y comentaristas. Incluso llegó a crearles un carnet del "así me vieron" que iba entregando por la blogosfera alante, que sembradita la fue dejando de sus obras carneteriles.

     No aspiro yo a tal éxito, la verdad es que ni siquiera pensaba hacer un post sobre esto, fusilando una idea ajena de un modo tan perverso, pero hay dos personas que, éstas sí, han dejado -al menos momentáneamente- sus blogs aparcados no sin antes enviarme un par de visiones de mí mismo. Y la verdad es que siempre es emocionante que piensen un poquito en tí, aunque no tenga mucho mérito porque la Z es una letra muy prolífica, y sino mirad cualquier película de "El Zorro". Que no quiere eso decir que yo tenga nada de zorro porque todos sabéis que de zorrear, aquí, más bien poco. Pero revisando el Whatsapp hace un par de días me encontré con una fotografía que mi querida "Have a Nice Day", del extinto y siempre conciso blog homónimo me envió al ver una película y acordarse de mí. Se trata de Zeta, el pingüino supersurfero, el "Rey del Surf" de la pelicula "Locos por el surf". No es que yo me parezca mucho a un pingüino, ni por supuesto soy el rey del surf, porque yo las olas de diez metros no las veo ni desde la orilla, pero me ha hecho mucha gracia que pensase en mí y, de hecho, creo que tendré que invitarla a un café un día de estos para agradecérselo.

     Y fue recibir su foto enviada con todo el cariño y recordar otra que tenía desde hace un tiempo en el mail de este blog, remitida por Adrianos, del blog "Memorias de Adrianos" (se ve que en esto de ponerle títulos a sus blogs la gente en general no nos esmeramos demasiado, jajaja), que también lleva una temporada desaparecido de la blogótica aunque intuyo que, a no mucho tardar, volverá. La suya es una foto que alguien utilizó de presentación en Instagram, una especie de twitter para fotos, según él dijo, aunque yo no sepa aún muy bien ni cómo es el twitter en realidad, jejeje. Esta foto es una auténtica pasada, y quien la ha hecho tiene muy buen arte en esto del dibujo (además de un estupendo gusto eligiéndo apodo, claro, jajaja).

     Si el de Have a nice day era un blog muy personal (qué blog no lo es, en realidad) en donde básicamente nos comentaba sus dos pasiones: el surf y sus mascotas (sobre todo cierto perro que anda por ahí todo el día meneando el rabito), el de Adrianos era un blog reflexivo que invitaba a reflexionar sobre las cosas que suceden en el mundo alante, con una visión cultural sin rallar el esnobismo que era muy de agradecer. Cualquiera de los dos tan recomendables como el que más, como igual de recomendable sería que volvieran por sus fueros...

     Y es que, la verdad, no sé que pasa últimamente, pero está la blogosfera muy de capa caída. O soy yo que no maduro?

jueves, 7 de julio de 2011

Ladillas

     Hablaba hoy con una compañera de trabajo de la depilación masculina cuando me acordé de ellas. Le explicaba a esta buena mujer que hacerse la cera en los huevos no parecía muy sensato, salvo que quisieras terminar arrastrándolos por el suelo. Y entonces se me vino a la cabeza mi primera vez. El día en que yo, sí, yo, tuve ladillas. Y no me refiero al típico plasta que se te adosa como pegamento, no, hablo de esos bichitos marrones que se te enganchan a los pelos y que no hay quien se quite de encima fácilmente.

     Porque sí, debo confesarme, las he tenido. Pero no siempre es cierto eso de que sarna con gusto no pica, porque esta sarna picó pero de gusto nada, que yo, os puedo asegurar, no me había acostado con nadie en el año previo o así. Digamos que fueron una especie de souvenir inesperado de un Interrail de dieciocho días, durmiendo de albergue en albergue y de cama en cama. Nada de sexo, de alcohol sólo unas cervezas, y si me apuras un porro por eso de haber llegado a Holanda, pero nada más. Echando cuentas hacia atrás, creo que el regalito me lo debieron dar allá por Luxemburgo, qué majos ellos con su Duque y sus murallas. 

     El caso es que las pobres liendres andan de capa caída desde que se pusieron de moda las ingles brasileñas. En realidad, para vuestra ingormación, os diré que hay tres tipos de piojos en el cuerpo humano, tan especializados que se dividen por regiones anatómicas, dado que no es lo mismo el cabello que el vello y que el vello púbico, tales son los tres subtipos de piojos que hay. Mi compañera, de hecho, que esta más puesta según se ve, me dijo que incluso ni siquiera los piojos de la gente de raza negra pueden afectar a los de raza blanca, dado que su cabello es más rizo y grueso, y sencillamente, en los de raza blanca, se resbalan las pobres. 

     Así que estos artrópodos de miniatura, con tanto quitame de ahí esos pelos, están en peligro de extinción. Que no sé yo si será una gran pérdida genética, pero teniendo en cuenta que no aportan ninguna utilidad conocida al equilibrio del universo, tampoco pasará gran cosa si se extinguen del todo. Aquí fue donde nos surgió la gran duda, porque en buena lógica los ecologistas más recalcitrantes dirán que es un patrimonio genético que se pierde y todo eso, pero la solución que se me ocurre es que se pongan a defender a las pobres ladillas dándoles cobijo en sus pelos más íntimos. Ya me estoy imaginando a los de Greenpeace con letreros tipo "salvemos a las ladillas!". Aunque dada la incomodidad de tenerlas, supongo que lo mejor será establecer turnos rotatorios de, no sé, digamos un par de meses, porque en menos tiempo no sé yo si el pelo crecerá lo suficiente como para que las pobrecitas se nutran a gusto. 

     Y es que no sé si las habréis tenido, pero os puedo asegurar que no es plato de gusto. Al regreso de mi viaje, y tras unos diez o quince días, una noche me despertó un dolor punzante, casi un prurito pero más intenso, como un pellizco que te puedas dar con una cremallera, y encendí la luz. Y allí, en medio de mi pelambrera -hoy día bastante más podada gracias a la Body groomer y a la cuchilla de afeitar- estaba aquella cosa de color marron, una especie de arañita pequeña, pequeña, subiendo por uno de mis pelos cual Koala a un cocotero. No sé qué susto se llevaría él (o ella, vaya usted a saber) pero desde luego el mío fue de aúpa. Al día siguiente, armado de paciencia y tras consultar al médico, me dediqué a decirle adios a todo mi pelo desde las cejas para abajo. Aunque, ahora que ya soy experto, os diré que también crecen las hijas de puta pobres en una ceja si caen en tal terreno.

     Y así fue como surgió la gran duda... alguien más en este mundo ha sufrido un episodio similar, o es que realmente soy Bridget Jones y me estoy entrando ahora?

miércoles, 6 de julio de 2011

San Juan en Coruña

     Ya, ya, ya sé que casi medio mundo celebra el rito de la noche de San Juan. Y también sé que os importará un pepino (pobre hortaliza, que parecía una nimiedad y menuda la que se ha montado por su culpa), pero como este blog es personal e intransferible, os voy a contar un poco qué es lo que se hace en la noche de San Juan, en Coruña. Para que lo sepáis y ya os vaya quedando clarito, en mi ciudad el San Juan es la fiesta más importante del verano, y no es festivo. Eso supongo que será por las absurdeces de mi tierra, que luego tenemos un festivo (bueno, tienen, que yo no trabajo en Coruña) que es el de la virgen del Rosario, parece ser que por librarnos de una plaga en el medievo, la peste o algo de eso.

No es una pasada la de hogueras que hay esa noche?
     Nombrada fiesta de interés turístico nacional desde hace un porrón de años (y camino del internacional, supongo) lo característico en esa noche del 23 de junio es reunirse con los amigos en una de las playas de la ciudad a hacer una hoguera y pasar la noche alrededor de ella. Así es que se juntan en las playas de Riazor, Orzán y Matadero (están las tres juntas, en el centro de la ciudad) más de cien mil personas y claro, entre el calorcito de las hogueras y el humo acaba la mitad de la gente sin camiseta y tal. Pues anda que no habrán surgido historias en esa noche más corta del año! Es todo muy idílico y bucólico, y hay quien además de saltar la hoguera el número de veces que te diga el de al lado (porque hay versiones de una, tres, cinco, siete veces, y a partir de ahí ya queda para deportistas de élite) se dedica a saltar las olas a la mañana, se decía antiguamente que para quedarse embarazada las mujeres que tenían problemas de fertilidad (y luego resultaba que la mitad de las veces la culpa era del marido, pero en fín...).

Aquí nuestra hoguera. Vaya churro. Aunque la foto me chifla
     Aunque últimamente es más un macrobotellón que otra cosa, la mayoría de la gente lleva la cena para hacer en las brasas, bien sea una parrilla, bien las típicas y estratosféricamente caras sardinas que esos días se ponen por las nubes. Hay, de hecho, un refrán gallego que reza que "polo San Xoán, a sardiña molla o pan" dado que es lo más típico tomar la sardina a la brasa en una base de rodaja de pan de maíz, que la verdad está muy bueno (aunque las sardinas a mí no me gustan nada con tanta espina y tanta escama).

      Este año yo me pedí el festivo en el trabajo para no tener que madrugar el 24, e invité a un par de primos míos con los que terminé saliendo. Tontearon con los de las hogueras de al lado para aasí conseguir madera (en San Juan y en Carnavales son las únicas fechas del año en que los coruñeses y coruñesas, coruñesos en general, se vuelven personas normales y se puede hablar con un desconocido sin que piensen que los vas a violar) porque llevábamos una mierda de cajas de fruta que eran como papel de fumar. Luego, cuando mis amigos se tuvieron que ir a dormir porque trabajaban el día siguiente, yo salí con mis primos. Terminé liándome con un chico de piercing en la lengua y llevándome a mi primo a casa a dormir una hora antes de que él tuviera que salir a hacer un examen. Y digo bien, mi primo, porque el otro desapareció y no volvimos a saber de él hasta el día siguiente. Todo un poco lamentable, soy consciente, pero qué demonios, una vez al año... no hace daño, jajaja.

en primer plano, un desconocido dejándonos su río dorado en la orilla del mar. Todo muy bucólico, lo dicho.

     Luego llegó el pasado fin de semana e hice lo propio con otro yogurín. En fín, que no aprenderé nunca...

     Sólo para que conste en acta, es casi un milagro que no pasen desgracias esa noche. De hecho este año ha habido dos muertos, pero como este es un blog de positivismo, no daré detalles escabrosos, que los hay. Quien quiera enterarse de más, sólo tendrá que buscarlo en internet.

     Eeeeen fín, que el año que viene San Juan cuadra en sábado... quién se apunta? XD

martes, 5 de julio de 2011

Bésame, bésame mucho

     En estos días en que todo el mundo anda con el orgullo por las nubes (bueno, algunos afortunados por la carroza), supongo que la gente liga más de lo normal. Pero, claro, eso será en las grandes ciudades donde haya guettos gays. Si vives en una ciudad pequeña o de tamaño medio estás más jodido, porque encima en estas fechas la ciudad se desinfla de personal homosexual reconocido, que huyen a pendonear reivindicar a la capital del reino, y quedamos los cuatro pringados que no tenemos dónde caernos muertos en un Madrid a rebosar, bien sea por pobres, por currantes, o por convicción (que suele en realidad esconder otros oscuros motivos pero queda mucho más políticamente correcto).

     El problema, en realidad, no es que se vacíen de gente los cuatro locales de ambiente que tengas al alcance. Es peor el guardar en tu interior una especie de Mr. Hyde que ríete tú de la Nicky de "Heroes". Y que tiene a bien salir cuando bebes dos copas o más. Que igual es culpa del verano y esto de andar deshidratados pero, yo no sé si a vosotros os pasa, es tomarse un trago y empezar a soltarse la lengua cosa fina. Y de eso quiero hablaros hoy, de las lenguas ajenas.

     Porque estaba chateando hace un rato con un colega cuando me informó de que ayer le dí un morreo de despedida (sí, lo sé, el alcohol acabará con mi reputación... o me pondrá justamente eso, reputación). No es que me preocupe lo más mínimo dar mala imagen, porque ya la tengo pésima, lo que preocupa es más bien el no recordarlo. Pero bueno, como yo le dije, eso será porque no lo has hecho mal. El último beso que recuerdo fue el de un chico que me espachurró un labio con su diente y me hizo ver las estrellas. ¿Pero qué pasa en este mundo que la gente no conoce sus dimensiones? Esto de besar debería ser como conducir un coche, hay que hacer prácticas y llevar la "L" durante un año para que los demás conductores sepan de tu impericia y te perdonen las cagadas (diría lo mismo a la hora del fornicio, pero la palabra cagadas no sería la más adecuada como ya pueden ustedes comprender muy bien).

     Eso por no hablar de la gente sapo. Que es contactar mucosa con mucosa y se te llena la boca de un río de babas que parece que estés besando un caracol. Eso estará bien si eres una anciana por eso de las arrugas del "código de barras", pero a esas edades a la gente tengo entendido que se le suele secar la boca, y pocos jóvenes van a besar a alguien que podría ser su abuela. Duquesa de Alba aparte (igual ahí radica la explicación del amorío con su maromo).

      Después están aquellos (y aquellas, que para eso existe la ley de igualdad) que no saben qué hacer con su lengua. Tienen un músculo que parece que les han puesto de adorno. Abren la boca y ahí te sueltan esa especie de molusco inerte para dejarse hacer. Pero vamos a ver... nadie les va a decir nunca que eso no es una revisión dental? Porque tenemos también el lado contrario, aquellos que te meten la lengua hasta la tráquea, que te provocan el vómito si te descuidas y en medio minuto han hecho recuento de todas tus piezas molares, empastes incluídos. Pues para eso me enrollo con un pulpo o una vaca, respectivamente.

     Y todo ello por no mentar a los halitósicos, los desdentados, los que gimen mientras les besas (sin tocarles nada, eh, que te dan cada susto que parece que les vaya a dar un síncope), los que muerden, los que se apasionan tanto que te cascan un diente (especialmente peligrosos por ese motivo los aquí-te-pillo-aquí-te-mato de las colas de los baños...) y, mi más reciente adquisición, los que tienen un piercing en la lengua. Pero eso fue historia del San Juan y será carnaza para otro post cualquier día de estos...

     En resumen, que esto de ser Mister Hyde cuando bebes está bien porque te dota de experiencia, pero esta claro que adquirirla es un camino no exento de sacrificios. Lo malo es no recordar la mitad de las personas con las que te enrollas (deben de quedarme dos o tres amig@s sin catar). Lo bueno es que, al menos, no beso del todo mal.

lunes, 4 de julio de 2011

más memes... memorandum, jajaja.

     Harto, hartito que me tienen en la vida y en el trabajo, entre el madrugar, el acostarse tarde, el preparar clases y atender clientela, esto es un sinvivir. Así estoy, que la que iba a ser mi semana del meme se ha convertido casi en el mes del meme, porque esto está haciéndose más largo que un día sin pan. Esta noche chateando con Christian, del blog "muros de nubes", me recordó que le debía un meme -otro más!- y además he hecho repaso mental y virtual y he descubierto otro meme que le debo a Pilar aunque a ella desde hace, si cabe, más tiempo aún. Así que me pongo primero con uno y luego con otro y, lo advierto, no haré más memes por ahora, porque, jeje, el siguiente meme lo voy a proponer yo (ya veremos a quién porque le pedí a Sergio que me hiciera un dibujo para acompañarlo y aún estoy esperando... ejem, ejem, ejem, esto de estar de vacaciones qué bien se lleva para quien puede estarlo).

     El primero de ellos, y como muestra del retraso monumental que llevo encima, es el "premio primavera", que digo yo que si hice la cabecera de mayo en junio (y la de junio debería empezar a hacerla, ejem), por qué no voy a poder hacer el premio primavera ahora que ya estamos en verano?. Ese maravilloso premio que me ha dado Christian, lleva asociada la tarea de confesar tres mentiras y tres verdades sobre uno mismo, pero no sé si diré qué es verdad y qué mentira, mejor así os lo imaginais vosotros y si alguno acierta, pues lo confieso. Y si no acierta, pues os jodéis, jajaja.

1- Una vez me propusieron hacer una película porno. Tenía la pareja con la que iba a rodar la escena, sabía el dinero que iba a cobrar y del guión pasaron de enviármelo porque realmente ¿alguien se estudia esos guiones?. No me apetecía ganar 400 euros previo folleteo de prueba con el productor porque me pareció mucho morro así que terminé quedándome pobre pero poco deshonrado.

2- Soy un asesino confeso de animales. En realidad, de un animal. Una hermosa gatita persa llamada Kitty que terminó tendida en un tendal a ver si se secaba después de poner la lavadora un día en que la buena de Kitty había estado jugando previamente, se supone, con la ropa sucia, ya dentro del tambor de la máquina. Nunca un gato muerto relució tanto.

3- Cuando viví en Nueva York me encantaba pasear por la quinta avenida, especialmente la zona entre la esquina sureste de Central Park y el Rockefeller Center, donde hay por cierto una tienda con modelos siempre sin camiseta que están de muy buen ver (además está al lado la catedral de Saint Patrick así que aquello era como estar en el cielo totalmente). Al volverme me traje de recuerdo un Ipod, que empecé a utilizar para ir al gimnasio. Era una gozada correr en la cinta, o por la calle, a ritmo de Fito o de Tina Turner. Hasta que le hice al Ipod lo que le hice a la gata Kitty -me remito al punto 2-. En este caso, un par de semanas de secado reanimaron la máquina. Finalmente, dos meses más tarde, la corrosión terminó de joderme el invento. Igualmente no se recordaba un Ipod más reluciente, en este caso en la chatarrería.

4- Cuando empecé a trabajar lo hice sin cobrar dinero, por eso de adquirir experiencia y ver un poco cómo iba todo aquello para lo que supuestamente me estaba formando durante largos años. La primera vez que trabajé estuve en una dura jornada laboral de dieciocho horas seguidas. Sólo paramos una hora para comer y cenar, en total. Como yo era idiota -no quiere esto decir que ahora no lo sea- me daba vergüenza pedir permiso para ir al baño, así que cada cinco minutos que tenía libres indagaba por dónde quedaban los baños. Finalmente, me enteré de dónde estaban, pero había que pedir una llave que tenían guardada en otro sitio. Mi pudor innato me venció y estuve durante todo ese tiempo sin mear y, eso sí, sin beber tampoco por miedo a explotar. Nunca tanto tiempo estuve meando al regresar a mi casa.

5- En una ocasión me compré un paquete de preservativos de sabores. Todos ellos tenían sabores frutales, uno de plátano, uno de fresa, uno de mandarina y alguno otro que no recuerdo. Con lo que no contaba cuando me los compré era con la escasa vida sexual que tendría a lo largo de mis años. Unos meses antes de que caducasen, empecé a probarlos en la soledad de mi casa. Así que podían verme los vecinos mascando lo que parecía un chicle -bastante incómodo, debo confesar- sólo para probar si el plátano realmente sabía a plátano. Puede que sea una forma original de tener sexo. Pero todo parecido con el sabor a fruta es pura coincidencia.

6- Me encanta hacer limpieza en la casa. En realidad, soy un obseso con el orden y la planificación. Una especie de Mónica la de Friends. Puedo estar horas limpiando mi casa para conseguir que los azulejos de la cocina brillen más que el sol de mediodía. Además, el ejercicio físico tonifica. Todo son ventajas, vaya. Arriba el Don Limpio!

     Ya, y ahora surge el problema, teóricamente debo un meme a Pilar, del blog Abalorios, pero Pilar, me tienes que perdonar, no encuentro en tu blog qué meme era... así que como en realidad yo odio la memística, lo voy a dejar sin hacer por ahora, jajajaja. Espero que me lo sepas perdonar, No te preocupes, te endosaré el meme que propondré próximamente, en cuanto alguien me haga el dibujo que un meme sin dibujo ni es meme, ni es ná.