Segunda edición de la sección de cocina de este vuestro blog predilecto, ya que no lo decís vosotros lo digo yo, jajaja. Cuando el anterior día os expliqué cómo hacer unos mejillones de rechupetete, hubo gente que comentaba por qué no empezar por algo sencillo (¿más?), así que me comprometo hoy a explicar cómo hacer un buen huevo frito, que siempre se dice que es lo más fácil pero luego te invita el novio a cenar a casa y te da una cosa fofa y blanquecina (hablo del huevo frito, claro, si no, chic@, cambia de novio), que más parece gomina que otra cosa, jajaja.
Pues eso, que aquí me tenéis, dispuesto a salvar vuestra relación de pareja antes de que se hunda en la monotonía del restaurante chino. Lo primero que uno debe hacer antes de cocinar un huevo frito (algún otro día os daré clases del huevo cocido y sus múltiples variedades, que lo dificil no es comérselos si no cocinárselos, jajaja) es conseguir una buena sartén. No, no vale la que usarías para tirársela a tu vecino del quinto que se cree Alfredo Krauss cada vez que se mete en la ducha -que, además, es de pascuas en ramos, muere, pituitaria-. Cómo debe ser una sartén? pues antiadherente. O lo que es lo mismo, que esté más o menos nueva. Un truco que usan los ricos es tener una sartén sólo para huevos fritos, pero eso no parece muy sensato en los tiempos que corren porque entonces tendríamos otra para las tortillas (si hago un post sobre la tortilla será un post "sólo chicas"? Pensaré en ello... ;P), otra para los pimientos de Padrón y, ya puestos, una para los pimientos morrones, otra para los verdes y así un largo etcétera que terminarías con más sartenes que los de Villaarriba y Villaabajo en un anuncio de lavavajillas.
Bien, que me expando como el universo. Segundo elemento imprescindible es un buen aceite para freir los huevos, que, además, a la hora de cocinar, ha de estar muy caliente. Y no vale la peli porno que el caliente tiene que ser el aceite. He aquí el secreto mejor guardado de los huevofritófobos, cómo hacer un huevo frito con puntilla: Pues eso, aceite supercaliente y dejar el huevo poco tiempo, no sé, un minuto o así debería bastaros si no queréis trocar el huevo en una suela de zapato.
La verdad que estoy pensando en huevos nadando en aceite y me pregunto: de dónde salió la expresión de flotar en una balsa de aceite? y eso de que el aceite es sano?. Aunque sea de oliva, jajaja.
Si os gusta, es el momento de echarle un poco de sal en la yema, allá vosotros y la tensión arterial. Personalmente prefiero huntar empapar la yema en ketchup que tiene licopeno y además es anticancerígeno (y luego decían que era malo, anda que...).
Y por último, claro (y yemo! Perdón por el chiste fácil XD), está el huevo en sí. No te recomiendo que uses los propios por mucho valor que le haya que poner a la cocina al principio. Y esto va en cuestión de gustos, y si no preguntadles a los productores, que dejaron de vender huevos blancos porque a la gente les daba mal rollito. Si es que somos unos racistas... De cómo cascarlo mejor no digo nada, porque en esto pasa como con todo, la experiencia es un grado. Y sí, ahora no te las des de santo, que de cómo cascársela bien que sabes, así que con el huevo igual. Y, si no, practica, jajajaja.
Y con esto termina la lección del día de hoy, que no ha sido nada nutritiva pero espero que al menos os sea útil. Viva la cocina de lo absurdo!
Yo prefiero banana con huevos, y déjate de almejas y mejillones, je, je, je, je....
ResponderEliminarColoco una nuez de mantequilla en una sartén. Cuando se3 derrite pongo el huevo y cubro con una tapadera. Muevo suavemente la sartén hasta que se vaya viendo que está terminado. Un poquito de sal y a untar pan.
ResponderEliminarChuchi, a mi esta receta de hoy no me convence... que lo sepas ya. En primer lugar no soy muy huevero... no que no tenga los huevos grandes, que los tengo en su tamaño, pero no me gustan demasiado, pese a ello, me he incursionado un par de veces en este mundillo... si, me salen con puntilla incluso, pero la llema, normalmente demasiado pasada, al punto de que es mojar pan en la misma y romperse el pan, pero no aparece nada de yema... le falta miga al post... ahm, y otra cosa, en casa tenemos sartenes nuevas.... Gordi, al que le salen parece que de maravilla a juzgar por la pinta que tienen sus huevos... jojojojo, utiliza una de las sartenes viejas!!
ResponderEliminarBicos Ricos
Que rico los huevos calentitos, me refiero a los huevos fritos( bueno los otros también, pero al tema, es decir al post).
ResponderEliminarBueno eso, que a mi me dijeron que para que no se pegue a la sartén ni salte el aceite se echa un poco de harina , aunque a mi la cocina sinceramente se me da fatal.
Bsos
Odio freir huevos... prefiero acariciarlos! jajaj!
ResponderEliminarNo soporto que salten en la sartén. Prefiero que salten sobre mi lecho.
Odio cuando se ponen duros. Es mejor tenerlos colgantes y blanditos.
Y ya... para colmo... me pongo irascible cuando al llevarlos al plato se rompen. Sin lugar a dudas, prefiero romperlos con mis mismos dientes.
Y.... verdaderamente... cada vez que paso por aquí, deseo con más ímpeto poder vértelos... jajajajaj!
Besos, chico de las curvas inguinales perfectas!
A mí tampoco me gustan mucho los huevos fritos y los prefiero con la yema más bien cuajada la verdad. Yo los hago con el menor aceite posible (en realidad siempre cocino así porque odio el sabor a fritanga).
ResponderEliminarBesos.
Es lo primero que cociné y por mucho tiempo me quedé en eso jajajaja, a mi me gustan revueltos eso sí porque la yema me da un asco...puej!!!...ese "me expando como el universo" me pareció comoquísimo jejeje. CariñoZ.
ResponderEliminar¿Huevos fritos? ¡Con lo malos que son para el colesterol!
ResponderEliminar¡Cuidado con el aceite recalentado que varias veces que es muy malo para el hígado!
I sobretodo ¡cuidado con no salpicarse con el aceite hirviendo! Que eso es malo para la piel.
Otra cosa que hay que cuidar, es que el aceite es altamente inflamable sobretodo cuando está caliente y es fácil provocar un incendio con un fallo de manipulación de la sartén...
En resumen, mejor que no intentéis aprender a hacer huevos fritos sin un maestro experimentado al lado...
Jajajajajajajaja...
Un abrazo.
Prefiero la tortilla...
ResponderEliminarLos fritos no están mal, pero tu sabes...el colesterol...Con la tortilla también, pero tengo menos culpa
Mira, Z. Te digo lo mismo que cuando nos preparaste los mejillones. Yo espero a comerme los huevos que tú me pongas cuando me invites a tu casita.
ResponderEliminarA mi si me gustan los huevos blanquitos...y depiladitos. Juas, juas
Los huevos también me gustan rellenos, ya me encargo yo de vaciarlos... Y eso de la puntilla...ni hablar. Enterita, enterita. Que solo la puntilla no da tanto gustirrinín.
(Yo no soy así, Z, tiarrón, eres tú que me provocas, desde que vi tu foto navideña no puedo dormir por las noches)
Besos y agur
Estoy contigo en que para los huevos una sartén exclusiva, es lo mejor, las otras pierden el teflón o se mezclan de otras cosas, y los huevos se te quedan pegados en el fondo, y lo suyo es que floten y chisporroteen...
ResponderEliminarjajajaja leerte en tu faceta culinaria y encima pedagógica es para reírse, ahora lo tengo claro, una sartén especial para mis huevos, el que tiene que estar caliente es el aceite y no yo.
ResponderEliminarBueno yo tengo algo claro y es una de mis máximas! Jajajaja estoy pensando seriamente colocarlo como epitafio! "Nadie cocina un huevo frito como tu propia madre!"
Jaja buscando pude entender la otra acepción de cascarse un huevo! jajajaja
Estupenda receta, pero unos huevos fritos saben siempre mejor acompañados de una buena salchicha (y yo soy de los que evito las grasas, pero un día se puede uno dar un capricho, jeje). Y eso sí, nada de ponerse uno desnudo a freír huevos, y mejor es ponerse un delantal para evitar daños colaterales, jajaja. Besos.
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